Cómo quitar el hielo del parabrisas sin dañarlo
Si amaneces con el cristal del coche cubierto de hielo, no le eches agua caliente: esto puede romper de forma definitiva el parabrisas de tu vehículo
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La gran helada de Madrid alcanza los -7,4ºC en Aranjuez
Las bajas temperaturas que trae el invierno -esta semana de hasta -10 grados en buena parte de España- pueden suponer un contratiempo y un gran dilema a los conductores. Tras dejar el coche a la intemperie, es posible que te encuentres que el parabrisas se ha cubierto de una capa de hielo. También es probable que te pille con mucha prisa y que decidas optar por la vía rápida. Pero proceder de forma acelerada ante un parabrisas plagado de hielo puede acabar en arañazo y, en el peor de los casos, propiciar que rompas el cristal por completo.
El dilema está servido, el hielo mantiene el cristal a temperatura muy baja, y si intentas descongelarlo de forma muy rápida puede expandirse y romperse en mil pedazos. Si utilizas un rascador, de seguro que acabarás raspando el cristal. Ante esta situación imposible, la Guardia Civil tiene una solución muy efectiva.
Tener los cristales despejados es una cuestión de seguridad vial. Tener el parabrisas lleno de hielo es un riesgo para la conducción, ya que dificulta la visibilidad. Esto se aplica también a la luna trasera, a menudo olvidada. Es por esto que las fuerzas del orden explican como abordar este problema.
Cómo quitar el hielo del parabrisas
Si amaneces con el cristal del coche cubierto de hielo, no le eches agua caliente. Como hemos dicho, esto puede romper de forma definitiva el parabrisas de tu vehículo: “No le eches agua caliente para quitar el hielo”, insisten las fuerzas del orden. “Es mucho más útil una mezcla de una parte de agua y dos de alcohol”, revelan. Esto es especialmente eficaz si la capa de hielo es muy fina. Recuerda que no puedes meter esta solución en el depósito del líquido del parabrisas del coche. Si no tienes alcohol, puedes rociar el cristal con agua salada.
Tras esto, es el momento de utilizar una rasqueta con mucho cuidado, asegúrate que tengas en tu poder una que esté diseñada para eliminar el cristal del parabrisas, de lo contrario podrías dañar la luna delantera de tu vehículo. Es preferible que sea una rasqueta de plástico, ya que si tiene una cuchilla afilada puede incrustarse en el parabrisas
Otro consejo que ofrece la Guardia Civil es arrancar el motor “y dirigir el flujo de aire al parabrisas”. Con esto se busca calentar el parabrisas de forma progresiva. De esta forma, los cristales no tendrán riesgo de romperse por un cambio brusco de temperatura. Para que este método sea más eficaz, recomendamos que actives el desempañado en el sistema de aire acondicionado de tu vehículo. Este botón suele tener un icono con flechas ondulantes.
Cuando lo peor haya pasado y el parabrisas esté descongelado, comprueba que los limpias no estén pegados al cristal del coche. Si están despegados y operativos, enciéndelos para limpiar el parabrisas.
Por último, es muy importante que retires el hielo de los faros. Con los coches antiguos de fatos halógenos, este paso es tan sencillo como encenderlos, ya que desprender calor suficiente como para derretir el hielo. Si tienes unos faros modernos, o unos halógenos con un diseño que separan mucho la parábola del cristal protector, tendrás que retirar el hielo a mano.
Qué no hacer si hay hielo en el parabrisas
Ahora que sabemos como abordar un parabrisas lleno de hielo, es muy importante tener en cuenta que acciones debemos evitar:
- No enciendas los limpiaparabrisas: si el parabrisas está congelado es muy mala idea utilizar el limpiaparabrisas. Echar agua a una superficie congelada solo empeorará el problema, ya que puede provocar que se te peguen los limpias a las lunas del coche.
- Poner la calefacción alta: recuerda que buscamos subir la temperatura del vehículo muy poco a poco. Es tentador poner el aire acondicionado del coche muy caliente, pero pones en riesgo la integridad del cristal del vehículo.
- Circular con hielo: aunque no tengas tiempo, debes asegurarte de que has retirado todo el hielo del parabrisas antes de desplazarte. Tal y como indica la DGT, “da igual que sea solamente durante unos metros: la falta de visibilidad puede provocar situaciones peligrosas”
Cómo prevenir el hielo del parabrisas
Ante todo, prevención. Si no quieres amanecer con el cristal de tu coche lleno de hielo, es importante que tomes medidas para evitarlo. Más vale ser precavido que intentar eliminar el hielo a toda prisa porque llegas tarde a tu destino:
- Pon a punto tu limpiaparabrisas: mantener los cristales de tu coche en buen estado es una carrera de fondo. Asegúrate de sustituir tu limpiaparabrisas si no funciona correctamente o si ha superado la vida útil que indica el fabricante. Si los limpias no funcionan bien, pueden crear zonas que comprometan la visibilidad al exterior del vehículo.
- Ojo con el depósito del líquido del limpiaparabrisas: además de almacenar la solución jabonosa con la que limpias el parabrisas, este compartimento puede servir de mucho más. Existen productos específicos para las temperaturas frías. Busca productos para limpiar el parabrisas que especifiquen que contienen anticongelante. Usar un líquido convencional cuando caen las temperaturas puede comprometer la salud de tu vehículo. Si el agua y jabón se congelan en el interior de tu coche, pueden estropear la bomba eléctrica. Es más, si el líquido del parabrisas está congelado deja los limpiaparabrisas prácticamente inservibles, por lo que no podrás abordar en carretera situaciones en las que tengas que limpiar la luna delantera.
- Cubre los parabrisas: la Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda en su revista digital cubrir los parabrisas con mantas o cartones para que no amanezcan helados. Para mantener sujetos estos elementos, puedes dejarlos pillados con las puertas delanteras de tu vehículo. Cubre con una mancha el exterior parabrisas de tu coche, y cierra las puertas delanteras con los extremos del tejido por dentro. También puedes sujetas mantas y cartones con los brazos del limpiaparabrisas. Al levantarlos, ten cuidado de no quebrarlos por accidente. Si utilizas tus limpias para sujetar la manta o el cartón, conseguirás protegerlos también de la helada y evitar que se peguen al cristal.