El Gobierno prohíbe las gallinas y aves de corral al aire libre por el aumento de riesgo de gripe aviar
En España no se ha detectado ningún foco, sí en Francia o en Portugal y se permitirá la cría al aire libre si se cuenta con telas pajareras o dispositivos que impidan la entrada de aves silvestres
Aragón prohíbe la presencia de aves de corral y cautivas en certámenes al activarse el riesgo alto de gripe aviar
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha prohibido la cría de aves de corral al aire libre ante el aumento de riesgo de la gripe aviar, aunque en España no se han detectado casos. Una medida que afecta, de entrada, a las zonas de especial riesgo, por ejemplo, las zonas con humedales de las diferentes comunidades autónomas.
El Ejecutivo ha actualizado la situación epidemiológica en Europa y ha declarado riesgo alto de influenza aviar, lo que ha conllevado nuevas medidas que han entrado en vigor esta semana.
“Durante los últimos meses, se han detectado brotes”, indica, “en aves de corral y en aves cautivas, así como en aves silvestres principalmente en la zona centro y norte de Europa”, explica el Ministerio. “En particular, en las últimas semanas se ha producido un aumento en el número de casos detectados”, en otros países europeos, “lo que indica una tendencia al empeoramiento de la situación, con el consiguiente aumento de riesgo para España”.
En concreto, señala un aumento de los focos en países vecinos, como Francia y Portugal, que se suma a otro factor, “la bajada de temperaturas en España durante el mes de enero”. Esto, junto con “los mapas de riesgo comarcal de presencia del virus basados” en modelos predictivos “hacen recomendable aumentar el nivel de riesgo a nivel nacional y aplicar medidas de mitigación de riesgo en aras de tomar un enfoque preventivo en aplicación del principio de precaución”.
Entre estas, señala el Ministerio, está la “cría de patos y gansos con otras especies de aves de corral”. También, la citada prohibición de “cría de aves de corral al aire libre” o “dar agua a las aves de corral procedente de depósitos de agua a los que puedan acceder aves silvestres, salvo en caso de que se trate esa agua a fin de garantizar la inactivación de posibles virus de influenza aviar”.
Aunque esté prohibido la cría al aire libre, la decisión del Ejecutivo deja alternativas, porque se “podrá autorizar el mantenimiento de aves de corral al aire libre, mediante la colocación, si ello fuera posible, de telas pajareras o cualquier otro dispositivo que impida la entrada de aves silvestres”. Eso sí, “siempre que se alimente y abreve a las aves en el interior de las instalaciones o en un refugio que impida la llegada de aves silvestres y evite el contacto de estas con los alimentos o el agua destinados a las aves de corral”, según recoge la decisión tomada por la Dirección General de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal.
Medidas necesarias, pero se necesitan más
“Son medidas necesarias”, apunta Eloy Ureña, responsable del sector avícola de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG). “La decisión del Ministerio puede ser un inconveniente para quienes tienen ponedoras, pero es peor tener un positivo, porque mueren y porque suponen una pérdida relevante para la explotación”, al conllevar el sacrificio del resto de aves, añade. Asume que son medidas “correctas”, aunque también pueden quedarse cortas, porque una malla puede no ser suficiente para evitar contagios, por ejemplo, a través de excrementos de aves silvestres. Ureña recalca que en España no ha habido casos, como sí ha ocurrido en Francia, donde según datos del Ministerio se han detectado 15 focos solo en aves de corral, lo que ha abierto la puerta a la vacunación.
Por su parte, Carlos Esparcia, secretario de Ganadería de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) Murcia, señala que las medidas tomadas esta semana derivan de “una orden que ya arrancó en 2016, que se ha venido actualizando porque en los últimos años ha habido una trasmisión a nivel mundial” y también que este sistema “hasta ahora ha sido efectivo porque España no ha tenido grandes problemas, como sí ha habido en otros países de la Unión Europea, Asia o Estados Unidos”.
“Tenemos que esperar a ver si la situación mantiene la evolución, pero tenemos un sistema de vigilancia muy consolidado”, ahonda Esparcia. También que los siguientes pasos, si la enfermedad va a más, serían en torno a posibles focos, donde habría “más medidas de contención, como la restricción del movimiento de los animales o de piensos, pero es importante lanzar un mensaje al sector, porque es mejor prevenir que curar”.
“Necesitamos más apoyo del Gobierno y de las comunidades autónomas porque estas medidas pueden estar bien pero necesitamos respaldo, por ejemplo, para financiar arcos de desinfección” de las propias aves. “Los primeros interesados en que no se contaminen las aves somos nosotros”, señala, a su vez, el responsable del sector avícola de COAG.