El polémico adiós de Johnny Herbert como comisario de la FIA
La decisión, anunciada este miércoles, pone fin a una etapa marcada por la controversia en torno a su imparcialidad en las sanciones impuestas en los Grandes Premios
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La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha decidido prescindir de Johnny Herbert como comisario de Fórmula 1, alegando la incompatibilidad de su cargo con su papel como comentarista en medios de comunicación. La decisión, anunciada este miércoles, pone fin a una etapa marcada por la controversia en torno a su imparcialidad en las sanciones impuestas en los Grandes Premios.
Herbert, de 60 años, había manifestado su intención de continuar en su rol durante la temporada 2025, con presencia confirmada en el Gran Premio de Australia. Sin embargo, la FIA optó por apartarlo, argumentando en un comunicado que “después de discutirlo, se acordó mutuamente que sus funciones como comisario de la FIA y comentarista de los medios de comunicación son incompatibles”.
El comunicado de la FIA: Herbert
“Lamentamos anunciar hoy que Johnny Herbert ya no ocupará el puesto de comisario-piloto de F1 de la FIA. Johnny es muy respetado y aportó una experiencia y unos conocimientos invaluables en su función. Sin embargo, después de discutirlo, se acordó mutuamente que sus funciones como comisario de la FIA y las de experto en medios eran incompatibles. Le agradecemos su servicio y le deseamos lo mejor en sus futuros proyectos”, anunció la Federación que preside Mohammed Ahmed ben Sulayem desde 2021.
Por su parte, Herbert respondió con otro comunicado publicdo a través de sus redes sociales. En él agradeció la oportunidad que le brindó el máximo organismo regulador de las competiciones automovilísticas, y destacó que el trabajo de comisario de carrera es difícil por las decisiones que hay que tomar. “Estoy muy agradecido por la oportunidad de ser piloto delegado de la FIA y he disfrutado muchísimo el papel en el que he participado a lo largo de los años. Es un trabajo difícil y hay que tomar decisiones”, destacó.
“Como comisarios, hemos tratado y seguiremos tratando tanto a los pilotos como al personal del equipo con el mayor respeto y seremos imparciales en todo momento durante todos los fines de semana del Gran Premio de F1. Finalmente, estoy muy agradecido al presidente y a todos en la FIA por las oportunidades que me han brindado”, culminó.
Un 2024 con polémicas decisiones
Durante la temporada pasada, Herbert se vio envuelto en varias decisiones polémicas, particularmente en las sanciones contra Max Verstappen en Austria y México, lo que provocó críticas del equipo Red Bull y del padre del piloto, Jos Verstappen. “No creo que un comisario deba hablar con la prensa en absoluto”, declaró este último a Viaplay, en referencia a la doble faceta de Herbert.
Las dudas sobre su imparcialidad venían de lejos. Sus comentarios sobre incidentes entre Verstappen y Lando Norris, o su inclinación hacia los pilotos británicos como George Russell y Lewis Hamilton, alimentaron la percepción de que su juicio no era del todo neutral. Su reciente pronóstico de que Aston Martin sería la decepción del año y su deseo de ver a Hamilton ganar un octavo título fueron la gota que colmó el vaso para la FIA.
Herbert, un piloto resilente
Johnny Herbert no solo es conocido por su faceta de comisario y comentarista. Su trayectoria como piloto estuvo marcada por la resiliencia. Tras sufrir un grave accidente en la Fórmula 3000 (F3) en 1988 que casi le cuesta la movilidad en las piernas, logró debutar en la F1 con Benetton y puntuando en ese primer Gran Premio, el del Brasil. No obstante, sus irregularidades y sus malas calificaciones hicieron que la escudería prescindiera de él. Tras un regreso a F3, regresó a la categoría reina de la mano de Tyrrell Racing.
Tras rodar para Lotus un breve tiempo después regresó a Bennetton a final de 1994, año en el que Michael Schumacher consiguió el primero de sus siete títulos. Herbert siguió en el equipo como compañero de el Kaiser en 1995. Ese año subió a lo más alto del podio en el Gran Premio de Gran Bretaña, en el circuito de Silverstone; y en el Gran Premio de Italia, en Monza. Terminó el mundial en la cuarta posición del campeonato de pilotos mientras que Schumacher se hacía con su segundo título.
En 1996 Benetton no contó con él para continuar en el equipo y fichó para Sauber, compartiendo escudería con otro piloto alemán, Heinz-Harald Frentzen. El británico permaneció dos temporadas en el equipo, y en 1999 consiguió su tercera y última victoria en la Fórmula 1 de la mano de Stewart Grand Prix, el equipo que fundaron el tricampeón de F1 Jackie Stewart y su hijo Paul Stewart en 1997. Continuó una temproada más en el equipo que cambió de nombre, Jaguar Racing, y esa fue su última temporada.