Protestas, fuertes medidas de seguridad y miles de banderas de Palestina en la visita del Maccabi de Israel al Baskonia
El pabellón Fernando Buesa Arena de Vitoria, al que ha llegado una manifestación, ha vuelto a ser tomado por la Ertzaintza durante el partido anual del equipo de Tel Aviv en la capital vasca
En 2024 - Cientos de banderas de Palestina y cánticos de “Israel, genocida” en el partido del Maccabi contra el Baskonia
El Maccabi de Tel Aviv es el tercer equipo contra el que más veces ha jugado el Baskonia en la Euroliga, donde ha competido en todas y cada una de las 25 ediciones disputadas. La de este viernes ha sido la vigésima visita del equipo señero de Israel y la segunda desde el inicio en 2023 de la operación militar que ha dejado casi 50.000 asesinados. Desoídas algunas peticiones de suspensión del encuentro, el partido se ha disputado con protestas en el exterior y en el interior del Fernando Buesa Arena y en medio de fortísimas medidas de seguridad que solamente se producen en Vitoria cuando el visitante es este club que viste de amarillo y que incorpora algunos símbolos hebreos en su equipación.
Los aficionados del Baskonia iban al partido tras haber recibido un largo correo electrónico en el que se les avisaba de “modificaciones” y “cambios operativos” sin explicación adicional. ¿Qué cambios eran? Las puertas de acceso se han limitado a cuatro para realizar controles policiales y de seguridad privada más exhaustivos. Eso ha ralentizado la entrada de los seguidores, a los que se había rogado acudir con más antelación, hasta 90 minutos. La convocatoria de una manifestación que ha recorrido las calles de Vitoria desde Zaramaga hasta Zurbano también ha implicado cortes al tráfico y suspensión de algunos servicios de transporte público. La Policía de Vitoria ha redoblado sus esfuerzos por ello. Esa marcha ha sido secundada por un miles de personas. Los organizadores han interpretado que el partido “blanqueaba al sionismo”. Han iluminado con bengalas sus reivindicaciones.
Pero lo más llamativo, evidentemente, ha sido la seguridad. Una fuente de la Ertzaintza indica que el personal de la comisaría de Vitoria movilizado se ha “duplicado” en relación a un partido de Euroliga, como el de la pasada semana contra el FC Barcelona. También se han incrementado las furgonetas de Brigada Móvil (antidisturbios) y desplegado unidades de Intervención especial, explosivos o caninas, entre otras. “Está todo dios movilizado”, ironizaba un agente.
Sí, el club visitante también aporta su propia seguridad privada, que ha realizado sus propios barridos y revisiones, aunque la Policía vasca se ha encargado de blindar tanto el hotel del Maccabi -el NH Canciller Ayala del centro- como los trayectos como los entrenamientos y, por supuesto, la estancia en el pabellón de este equipo. En el exterior había una decena de 'francias' o furgonetas antidisturbios. También otras tres Mercedes-Benz no rotuladas de Intervención. Y varios coches-patrulla. Muchos. Dentro, en las puertas había agentes uniformados reforzando los cacheos de la seguridad privada. En los pasillos patrullaban más ertzainas y en la pista perros-policía. En el recinto intentaban pasar inadvertidos un puñado de funcionarios de paisano pertrechados con mochilas y otras protecciones o grabando vídeos en medio de las gradas.
El Maccabi ha llegado en un autobús blanco. Más de la mitad de su plantilla la componen jugadores de Israel, como lo son buena parte de los miembros del 'staff'. Como Shimon Mizrahi, el presidente, siempre acompañado de su legendaria bufanda amarilla de lana. Ha necesitado escolta policial. Una joven le ha llamado “genocida” desde muy lejos. En el calentamiento de los visitantes ha sonado 'The Killers' de fondo. Lo llamativo es que los jugadores locales han ido también en autocar y no en sus vehículos, como es costumbre.
Las visitas del Maccabi y también de su sección de fútbol a países europeos arrastran un historial de noticias de despliegues especiales y refuerzos de la seguridad. También de polémicas. En la Euroliga de baloncesto los clubes de Rusia fueron inmediatamente apartados de la competición nada más iniciarse la invasión de Ucrania. Con el Maccabi, en cambio, no ha ocurrido lo mismo, aunque los partidos de casa no se juegan en Israel sino a puerta cerrada en Belgrado. “Fuera de Europa” es un cántico recurrente en las gradas del Buesa Arena. En lo que va de año, este club ha visitado también al Real Madrid y al FC Barcelona, los otros dos equipos de ACB en la máxima competición europea. También allí se ha discutido sobre la presencia de este símbolo del poder blando israelí. Llegó a terciar en el debate el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, que pidió no mezclar política y deporte.
Sin embargo, para los activistas que repartían banderas palestinas en la puerta el encuentro tenía mucho de política. Han imprimido 5.000 de esas enseñas. Su propuesta era mostrarlas repetidamente. Lo han logrado. Los tiempos muertos -en los que no se han programado juegos ni actividades más allá de la música- han sido una continua exhibición de esas banderas. Indar Baskonia, la grada de animación, quería llegar con el partido iniciado en señal de protesta. Pero no ha entrado finalmente en ningún momento. Han denunciado en redes sociales que la Ertzaintza les ha quitado algunas pancartas de apoyo a Palestina y han optado por ausentarse durante todo el evento.
Así, los decibelios en el Buesa Arena han sido muchos menos que en otras ocasiones. Durante el partido, el resto de la grada sí ha denunciado el genocidio en Gaza. Hace una semana el Baskonia pidió por megafonía evitar consignas contra Israel. Las protestas han ganado en intensidad hacia el final del partido y se ha coreado, nuevamente, el “Maccabi, fuera de Europa”. Y también “Palestina, askatu!”.
El Baskonia ha ganado 89 a 82 a sus visitantes. Después, en rueda de prensa, el entrenador israelí del Maccabi, Oded Kattash, ha ofrecido una respuesta genérica preguntado por el ambiente y el recibimiento. El preparador local, Pablo Laso, sí ha admitido que ha sido un día raro. “Todo esto no ha ayudado a que el equipo haya hecho su mejor partido”, ha indicado. A las 23.00 horas, la Ertzaintza ha informado que no se ha registrado ninguna incidencia reseñable en toda la jornada.