Un diputado y una senadora del PPdeG votan con Vox contra la oficialidad del gallego en Europa
El exvicepresidente de la Xunta, Francisco Conde, y la que fue presidenta del Parlamento de Galicia, Pilar Rojo, suman sus votos a los de la ultraderecha para aprobar una iniciativa que pide al Gobierno cesar "de inmediato" en sus esfuerzos por lograr el reconocimiento de Bruselas a las lenguas cooficiales
Los 15 años de gobierno de Feijóo y Rueda multiplicaron por dos el número de niños que no saben hablar gallego
No son un diputado y una senadora cualquiera. Francisco Conde encabezó la lista del PP por Lugo en las últimas elecciones generales. Antes, durante una década, dirigió la Consellería de Economía de la Xunta, hombre de la máxima confianza de Feijóo —del que fue vicepresidente, heredado por Rueda— hasta el punto de sonar como posible ministro del ramo. Por su parte, Pilar Rojo pertenece al círculo íntimo de Mariano Rajoy. Tras ser conselleira con Fraga, presidió el Parlamento de Galicia durante siete años. Después, se fue a Madrid, primero al Congreso y después al Senado; la última vez, por Albacete. En la comisión mixta para la Unión Europea, ambos votaron con Vox contra la oficialidad del gallego en Bruselas.
No estuvieron solos. Fue la misma postura que expresaron todos los representantes del PP en ese órgano, presidido por Conde y constituido por miembros de las dos Cámaras. Los populares respaldaron la iniciativa de la ultraderecha para “instar al Gobierno que cese de manera inmediata en sus esfuerzos” por conseguir la oficialidad en las instituciones europeas de gallego, catalán y euskera, “y que destine el coste a las verdaderas necesidades de los españoles”. El voto de ambas fuerzas fue suficiente para aprobarla.
El PP tan sólo añadió una enmienda “técnica” para “adaptar” la propuesta de Vox a la Constitución. La senadora por Zaragoza Luisa Fernanda Rudi —la que fue primera presidenta del Congreso— criticó que mientras la UE se enfrenta a “desafíos y amenazas externas e internas”, el gobierno se dedique a “escribir cartas con escasa respuesta” tratando la oficialidad de “asunto prioritario para el país”. Según Rudi, sólo es prioritario “para el gobierno socialista y su precaria estabilidad parlamentaria”. “Además, pretende que nos cueste dinero a los españoles”, añadió.
El “rotundo no” del PSOE fue expresado en gallego por Obdulia Taboadela para quien el PP “tendrá que dar explicaciones en Galicia, donde su actual líder gobernó durante 13 años” por el “ejercicio de boicot” que supone su oposición “sistemática al uso del gallego en el Congreso, el Senado y el Parlamento Europeo”.
La diputada por A Coruña criticó que lo hagan al mismo tiempo que “enredan con un pacto por la lengua para intentar justificar la evidencia de la caída de los hablantes de gallego”. “La Xunta es el único gobierno autonómico con lengua propia que vota en contra de que sus ciudadanos puedan hablarla con las administraciones”, concluyó.