¿Por qué todo el mundo quiere ir a Bali? Descubre cuatro alternativas

Desde hace años Bali es el destino favorito entre viajeros de todo el mundo como lugar de vacaciones. El principal atractivo son sus playas exóticas pero lo cierto es que, si es por eso, muchos otros destinos podrían estar en su puesto. Entonces, ¿por qué surge ese interés?

Este pequeño paraíso indonesio no solo atrae a turistas en busca de playas de arena blanca, sino que también ha ganado fama como un refugio, un lugar ideal para los que buscan escapar de la ciudad y una visita obligada para los amantes de la aventura. 

Un estudio realizado por Booking en 2023 reveló que el 70% de los turistas que eligen Bali lo hacen por su equilibrio entre naturaleza, cultura y bienestar. Es decir, una de las principales razones que posicionan a Bali en lo más alto de las listas de destinos de veraneo es la conexión que ofrece entre naturaleza exuberante, cultura milenaria y una oferta turística bien estructurada. Como causantes de esta combinación: las playas de arena blanca, los templos majestuosos o los característicos arrozales en terrazas. 

Además, el auge del turismo de meditación con sus múltiples retiros de yoga ha reforzado su atractivo para los que buscan desconexión. Actualmente, el slow-travel, que apuesta por un tipo de viaje relajado en el que no exista ningún tipo de prisa y solo suponga una experiencia enriquecedora incluye destinos como este entre los más cotizados.

Sin embargo, hay otros lugares que puede que pasen más desapercibidos y sean mejor opción para evitar algunas complicaciones que ya presenta este país indonesio, como la masificación de algunos espacios emblemáticos o problemas ambientales. Por ello, cada vez más turistas optan por experiencias similares en países como Sri Lanka o Tailandia.

Sri Lanka

Sri Lanka es un descubrimiento emergente para los que buscan una combinación de naturaleza, cultura y espiritualidad. Con playas de ensueño, como las de Mirissa y Unawatuna, este país insular también ofrece una rica historia con templos budistas y templos coloniales. 

Además, es un lugar ideal para el ecoturismo, con parques nacionales como Yala, donde encontrar leopardos, elefantes u osos perezosos. Y además, Sri Lanka también cuenta con centros de bienestar y retiros de yoga, especialmente en lugares como Arugam Bay y Ella, que ofrecen una experiencia similar a la de Bali, pero en un ambiente menos concurrido.

Koh Samui, Tailandia

Conocida por sus impresionantes playas, como Chaweng y Lamai, Koh Samui es una excelente alternativa a Bali para aquellos que buscan una mezcla de relax, naturaleza y espiritualidad. La isla también es famosa por sus retiros de yoga y bienestar, como Vikasa Yoga Retreat, que atraen a viajeros que desean reconectar con su “Yo”.Presenta numerosos atractivos naturales como las cascadas Na Muang y el Templo del Gran Buda. Al estar menos saturada que Bali, Koh Samui ofrece una experiencia más tranquila y personalizada.

Luang Prabang, Laos

El lugar rival de Bali para quienes viajan en busca de espiritualidad. Luang Prabang es un enclave budista, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO cuyos templos dorados destacan por su procesión diaria de monjes. Por ejemplo Wat Xieng Thong. Además, Luang Prabang ofrece acceso a cascadas como Kuang Si y senderos tranquilos que cruzan paisajes de montaña. A diferencia de Bali, Luang Prabang tiene una atmósfera más tranquila, sin las grandes masas turísticas consiguiendo una visita de tipo más íntimo.

Isla de Holbox, México

Holbox es una pequeña isla frente a la península de Yucatán, un verdadero paraíso para los amantes de la costa. Sus playas de arena blanca y aguas turquesas nada tienen que envidiar a las de Bali, pero lo que realmente la distingue es su ambiente relajado, casi sin coches y con calles de arena. La isla es famosa por su fauna marina y tiene un ambiente bohemio con una sociedad comprometida con la sostenibilidad.

Azores, Portugal

Este archipiélago de origen volcánico en el Atlántico es perfecto para los amantes de la naturaleza y el ecoturismo. Las Azores son ideales para los viajeros que disfrutan de actividades de aventura al aire libre como senderismo o buceo. Su paisaje está repleto de lagos volcánicos, campos verdes y playas vírgenes, ofrece una alternativa no saturada al turismo balinés. La isla de São Miguel, concretamente, es famosa por su Lago de Fuego y el Valle de las Furnas, donde los visitantes pueden encontrar aguas termales naturales. Perfecto para quienes buscan desconectar rodeados de una naturaleza espectacular.