Pablo de la Peña: Déjà vu Sexenal
En noviembre del 2018, a un mes de iniciar la presidencia de López Obrador, los especialistas en economía del sector privado respondían en la encuesta que realiza mes con mes el Banco de México, que el principal factor que podría obstaculizar el crecimiento económico del país era la incertidumbre política, así respondían el 23 por ciento de los encuestados. En un segundo lugar se encontraban con el mismo 11 por ciento de las respuestas la inseguridad pública y la falta de estado de derecho.
Para el 52 por ciento de los encuestados, los temas relacionados con la gobernanza en el país eran los principales factores que podrían frenar el crecimiento económico del país. Como parte de la gobernanza Banxico considera: inseguridad pública, corrupción, impunidad, inseguridad política y otros problemas de estado de derecho.
Después de un sexenio, en la última encuesta de Banxico a especialistas en economía del sector privado para el mes de septiembre de este 2024, el 18 por ciento de los encuestados dice que el principal problema que podría frenar el crecimiento de la economía mexicana es la incertidumbre política, y con el 16 por ciento de las respuestas se encuentran en segundo lugar la inseguridad pública y la falta de estado de derecho.
Ahora, los temas de gobernanza suman el 58 por ciento de las menciones como los factores principales que podrían frenar el crecimiento de la economía ahora que inicia la presidencia de Claudia Sheinbaum.
Pareciera que la historia se repite, aunque varían ligeramente los porcentajes, estamos hablando de que después de seis años los temas que más preocupaban a los especialistas en economía del sector privado sieguen siendo los mismos. Alguien diría, - ¡Claro! ¡Pues no se han resuelto! -.
Efectivamente no se han resuelto los problemas de inseguridad, de impunidad y de corrupción; y por otro lado hay que reconocer también que el inicio de una nueva administración federal siempre genera incertidumbre, y aunado a todo lo anterior, en esta ocasión se inicia con una serie de reformas que incrementan aún más la falta de certeza jurídica, como lo es la reforma al Poder Judicial, y por si fuera poco a esto se le suma la reforma a las instituciones y organismos autónomos.
En medio de todo esto, me llama mucho la atención que una preocupación de nuestra nueva presidenta es que ¡España no quiera emitir un perdón por la conquista! Creo que aprendió muy bien de su antecesor la estrategia de crear cortinas de humo para distraer la atención de los problemas reales que enfrenta el país.
No logro a entender cómo parece ser que la negativa de España de pedir disculpas por la conquista que pasó hace más de 500 años, sea un problema al mismo nivel de urgencia y prioridad que la inseguridad que vivimos en este 2024, que la incertidumbre institucional y jurídica que estaremos enfrentando en pocos meses y que la desaceleración económica que ya estamos sintiendo.
Recordemos que el dato que presentó el INEGI sobre el crecimiento real del Producto Interno Bruto de México para el segundo trimestre de este año fue del 1 por ciento respecto al mismo trimestre del 2023; y a penas del 0.2 por ciento respecto al primer trimestre del 2024.
Hace unos días el mismo INEGI dio a conocer el dato del crecimiento del indicador mensual de la actividad industrial de México (IMAI) para el mes de agosto, y éste presenta una variación negativa del 0.3 por ciento respecto al mismo mes de agosto del 2023, y también muestra una variación negativa del 0.5 respecto al mes de julio de este mismo año.
Esto claramente quiere decir que la economía mexicana se está desacelerando, y ahora los mejores pronósticos para el crecimiento de nuestro país para todo el 2024 no rebasa el 1.5 por ciento respecto al año pasado.
Por si fuera poco, en el reporte de INEGI sobre la actividad industrial por estado para el mes de junio del 2024, se muestran resultados un poco preocupantes. De las 32 entidades federativas, 9 presentan variaciones negativas en términos anuales; Nayarit muestra una variación de -20.5 por ciento respecto al mes de junio del 2023, Tabasco del -19.5, y Michoacán del -17.7 por ciento, por destacar los más graves.
Por otro lado, los estados con mayores crecimientos en su actividad industrial fueron Oaxaca con el 16.3 por ciento, Veracruz con el 9.4 por ciento y Morelos con el 8.1 por ciento. Como dato adicional, Jalisco presentó una variación negativa del 1.7, Coahuila del 1 por ciento positivo, y Nuevo León una variación positiva del 4.9 por ciento en términos anuales.
Es claro que la actividad industrial es muy diversa y desigual en el país, pero también es claro que estamos perdiendo ritmo; el lado positivo en los indicadores macroeconómicos es que la inflación se va controlando y hay expectativas para que el Banco de México reduzca nuevamente su tasa de interés objetivo antes de terminar el año.
Sin embargo, ahora que inicia una nueva administración federal será fundamental la dirección que tomen las decisiones en materia de inversión pública, de promoción económica y de atracción de inversión extranjera; pero creo que lo primero que se debe hacer desde la silla presidencial, es demostrar que se está regresando la seguridad en el país y que se puede contar con un estado de derecho y con confianza en las instituciones. Para poder definir su marca personal en esta nueva administración, la presidenta Sheinbaum deberá evitar el “déjà vu” de este inicio de sexenio como en el 2018.