Así es Tiny Glade, un precioso y relajante juego de construcción que se ha hecho viral en TikTok

Crea dioramas preciosos en pequeños escenarios de naturaleza exuberante con este prometedor título para PC que recuerda a Townscaper y Cloud Gardens.

En los últimos años ha surgido en el panorama independiente, especialmente en PC, un subgénero de los juegos de construcción de ciudades, hasta ahora siempre ligado a la estrategia. Frente a la gestión de recursos, los combates y la posibilidad de fallar, el simple placer de construir. El más representativo es el relajante Townscaper, pero también se ve esta tendencia en Cloud Gardens y Dorfromantik. Juegos sin estrés que dejan fluir una creatividad accesible para todos.



En el tercer trimestre de 2024 se sumará a esa lista el prometedor Tiny Glade, que llegará a PC (Windows y Linux) a través de Steam. En pequeños escenarios de naturaleza exuberante creamos, a golpe de ratón y con controles muy sencillos, preciosos dioramas formados por castillos, fortificaciones abandonadas y casas medievales de ensueño en las que la vegetación trepa por los muros y los animales pululan sin preocupaciones. Sin limitaciones, sin cuadrículas.

Del AAA al indie viral

Los artífices del proyecto son Anastasia Opara y Tomasz Stachowiak, un dúo que forman Pounce Light. Es la ópera prima del estudio sueco, pero juntos tienen más de 15 años de experiencia en la industria del videojuego AAA: Stachowiak es experto en las técnicas de renderizado y Opara en el campo de la generación procedimental. Sus nombres han aparecido en títulos de Electronic Arts, Creative Assembly y Embark Studios (The Finals).

Pero cuando un experimento procedimental de la desarrolladora captó la atención de decenas de miles en X (por entonces la red social aún se llamaba Twitter), ambos se embarcaron en este proyecto independiente, dejando atrás el ámbito de las superproducciones. Si bien es cierto que el éxito en redes no siempre se ve correspondido con el éxito del producto final, la comunidad de los juegos relajantes está interesada en Tiny Glade: algunos de los vídeos compartidos en TikTok alcanzan hasta los 20 millones de reproducciones.

@anaopara Replying to @keoxity the game will indeed create pillars if an arch is too wide now 😊 #indiegame #relaxinggame #castlecore ♬ Ghibli-style nostalgic waltz - MaSssuguMusic

El interés no viene de la nada, pues el juego de Pounce Light ha sabido identificar los dos puntos clave de obras mencionadas más arriba, Townscaper y Dorfromantik: la satisfacción audiovisual mezclada con la satisfacción jugable. Es decir, que las acciones realizadas con el cursor sean gustosas por sus implicaciones en la partida, pero también por cómo se representan en la pantalla y a través de los altavoces o auriculares.

Generación procedimental para crear dioramas preciosos

Hay algo mágico en ver cómo un clic crea y transforma automáticamente algo bonito en algo precioso, como demuestra cualquier tráiler o GIF del título. Al alargar un camino por un muro, se genera un arco en el mismo. Si después amplias ese arco, Tiny Glade pone pilares por sí mismo. Los arcos se transforman en vallas y puertas, sin intervención del jugador, al bajar el arco.

I was updating screenshots on our Steam page, and I made this winter diorama; figured I'd share a replay of it :3 pic.twitter.com/Wk65dIzxCj— Tiny Glade 🏰🌿 Wishlist on Steam ✨ (@PounceLight) February 5, 2024

Aquí se utiliza la generación procedimental, habitualmente usada para crear mundos abiertos inmensos, con un objetivo estético y jugable. Para permitir a todos, con independencia de sus capacidades artísticas, de su experiencia con los videojuegos y de su tiempo, generar algo bonito. El cursor del ratón y sus botones son suficientes para crear, ampliar y personalizar castillos y hogares, para conectarlos con puentes, para elevar los edificios. Algún clic más y se modifica el color de los muros, se rotan las construcciones anexas y mucho más.

Todo ello con una representación satisfactoria, en la que cientos de ladrillos y tejas hacen un pop visual y sonoro al arrastrar el ratón, y en la que se oye un cálido arrastre de sedimentos al elevar el terreno. Cada acción tiene su animación de hacer y deshacer dependiendo del elemento que se esté modificando. El acabado que recuerda a un dibujo en acuarela, acompañado de la vida salvaje (insectos, ovejas que acariciar, etc.) y un ciclo día y noche que altera la estampa, terminan de aportar una calidez relajante a lo que se muestra en pantalla.



Que, por supuesto, se acompaña de música y efectos de sonido en la misma línea. Pounce Light han acudido al equipo de NokNok Audio (¡también responsables de Townscaper!) para ello, un colectivo de artistas sonoros que han colaborado en juegos independientes de sobra conocidos. En concreto, el diseño sonoro corre a cargo de Martin Kvale (Sable, Dome Keeper), y la música es de Oda Tilset (Viewfinder, Snufkin).

Recuperar la sensación "de que tienes todo el tiempo del mundo"

En definitiva, Tiny Glade nos propone un escape a los "muchos desafíos y la ansiedad presente en la vida moderna", dicen los desarrolladores. "Queremos capturar la atmósfera de un día de verano apacible en la orilla del lago, de construir un castillo de arena con salpicaduras del agua a tus pies; el sentimiento infantil de que tienes todo el tiempo en el mundo".