El gesto de Alcaraz con el público tras su sorprendente eliminación en el US Open
Carlos Alcaraz no pudo responder el último saque de Van de Zandschulp y así decía adiós al US Open en segunda ronda (6-1, 7-5 y 6-4 en dos horas y 19 minutos). En realidad, parecía resignado desde hacía tiempo a que la derrota iba a llegar y aunque pareció darse una última oportunidad en el tercer set, no logró levantarse.
Fue corriendo a dar la mano a su oponente y se marchó de la pista Arthur Ashe a toda prisa. Eso sí, tuvo un parón antes de entrar en el túnel para hacer esto:
El tenista español pidió perdón a los aficionados, consciente de que no había tenido una buena actuación y de que en estos momentos no está en su mejor nivel, como admitió después en conferencia de prensa. "La verdad es que lo que siento ahora mismo es que en vez de dar pasos hacia adelante he dado pasos hacia atrás en tema de cabeza. Y no entiendo por qué", aseguró. "Venía de un verano espectacular, de Roland Garros, de Wimbledon, salí de ahí diciendo que mentalmente había dado un paso hacia adelante, que me había dado cuenta de que para ganar grandes cosas había que estar duro de cabeza. Vengo a esta gira y es como que he dado pasos hacia atrás: como que mentalmente no estoy bien, no estoy fuerte, ante los problemas no sé controlarme, no sé cómo gestionarlo. Y eso para mí, la verdad, es un problema", añadió. Y el colapso mental lleva de forma inexorable al tenístico.
"Me estoy conociendo"
Aunque en su palmarés figuran ya cuatro Grand Slams, Alcaraz tiene sólo 21 años y asegura que todavía se está “conociendo”. “El calendario del tenis es muy apretado. Me tomé un par de días después de los Juegos y pensaba que iba a ser suficiente, pero no lo ha sido. Quizá he llegado aquí sin la energía que pensaba que iba a tener. No quiero poner eso como excusa, pero a lo mejor soy el tipo de jugador que necesita más días de descanso antes de un gran torneo", indicó.
También tuvo buenas palabras para su rival, al que había superado las dos veces anteriores que se habían enfrentado, en el Open de Australia 2021 y en Basilea 2022. "Pensé que iba a darme más puntos 'gratis', pero no cometió muchos errores que pensé que iba a hacer. Eso me confundió un poco. No supe cómo gestionarlo y cómo lidiar con ello. No pude incrementar mi nivel. Mi nivel se quedó en el mismo punto todo el partido y no fue suficiente. Cometí muchos errores. Cuando quise intentar remontar, era muy tarde", analizó.
Guerra contra él mismo
"En el tenis juegas contra alguien que quiere lo mismo que tú, ganar el partido, y tienes que estar tan calmado como puedas para pensar mejor. Hoy estaba jugando contra mi oponente y contra mí en mi cabeza. Eran muchas emociones que no pude controlar. Estaba arriba en algunos puntos, luego perdía otros y me venía abajo. Era una montaña rusa en mi cabeza. No puedo ser así si quiero pensar en cosas grandes. Tengo que mejorar, tengo que aprender de esto", concluyó.