Una pareja alemana asesina brutalmente a dos refugiadas ucranianas para quedarse con su bebé
Una pareja del sur de Alemania fue acusada de matar a dos refugiadas ucranianas, madre y abuela de una bebé que los sospechosos secuestraron con el objetivo de apropiársela, indicó el martes la fiscalía.
El hombre de 43 años y la mujer de 44 fueron arrestados en marzo, una semana después de los hechos, precisó la fiscalía de Mannheim (sur). La pareja está siendo procesada por haber drogado a una mujer de 27 años y a su madre de 51 años, antes de asesinarlas y secuestrar a la bebé.
La pareja "albergaba desde hacía tiempo el deseo insatisfecho de tener una hija" y planeaba "secuestrar una bebé y hacerla pasar por su propia hija", detalló la fiscalía.
La mujer se infiltró en un grupo de Telegram de apoyo a refugiados ucranianos y entró en contacto en enero con una mujer de 27 años, embarazada. Esta última, a punto de dar a luz, buscaba una intérprete para el nacimiento de su hija.
A principios de marzo la pareja invitó a la familia a un restaurante y les administró sedantes. Según los investigadores, el marido mató a la abuela mediante golpes en la cabeza y arrojó el cadáver a un lago. Luego mató a la madre también mediante golpes en la cabeza e incineró el cuerpo.
Los sospechosos regresaron a su casa con la recién nacida pero a principios de marzo, unos caminantes descubrieron el cuerpo del joven de 27 años en la zona de la presa del Rin en Hockenheim. Finalmente la pareja fue arrestada tras el hallazgo del cadáver de la joven mujer. La niña, de cinco semanas de edad en el momento del arresto, fue confiada a la protección infantil.
A principios del verano, la hermana de la mujer asesinada asumió la tutela de la niña. Así lo anunció el abogado del joven de 21 años. A finales de junio regresó a Ucrania con el bebé, al que quiere adoptar, si bien el proceso podría llevar meses.
El Tribunal Regional de Mannheim decidirá ahora si se admiten los cargos. Aún no está claro cuándo comenzará el juicio contra la pareja de Sandhausen. Los dos acusados permanecen detenidos.