Pecco Bagnaia recoge cable tras sus duras acusaciones contra Álex Márquez
Pecco Bagnaia cargó muy duramente contra Álex Márquez el domingo del GP de Aragón. Pocos minutos después de la caída de ambos en la carrera de MotoGP, el italiano no se mordió la lengua ante los periodistas y acusó al español de haber acelerado cuando no tocaba con la intención de derribarlo. Fue muy duro y Álex se sintió dolido, porque siempre ha sido un piloto noble y además ambos tienen una magnífica relación.
Unos días después, este jueves en Misano, en la previa del GP de San Marino, Pecco quiso rectificar y pedir disculpas al pequeño de los hermanos Márquez por su reacción. "Me quiero disculpar ante Álex Márquez por las palabras que dije tras la carrera. Estaba muy enfadado en ese momento por lo que había sucedido, y mirando la telemetría incluso empeoraba la cosa, desde mi punto de vista, pero en cualquier caso, me pasé y fueron demasiado fuertes mis declaraciones, ya que no quería decir que me tiró a propósito, el hecho es que su defensa fue un poco agresiva, que es lo normal cuando luchas por el podio", reconoció Bagnaia.
"Sigo pensando lo mismo acerca del incidente, porque tengo mi propia perspectiva de lo que sucedió, pero me pasé con mis palabras y se lo dije a Álex; y quería disculparme", insistió en la sala de prensa del circuito de Misano.
A pesar del aparatoso accidente, ninguno de los dos sufrió daños graves, aunque ambos están doloridos y el Mundial ha entrado en una fase en la que apenas da respiro entre carrera y carrera. "Mis condiciones físicas no son las mejores, no siento toda la movilidad que desearía en el cuerpo ya que el impacto fue importante en mi hombro y tuve unos 170 kilos (de la moto) sobre mi cuerpo y el golpe con el asfalto fue fuerte, pero no se me ha roto ningún hueso, por suerte, pero los músculos y los ligamentos están sufriendo un poco", explicaba Pecco, que desde este fin de semana intentará remontar los 23 puntos de desventaja que ahora tiene en la clasificación respecto a Jorge Martín.
El italiano insistió sobre el percance con Alex Márquez. "Él vino a nuestra oficina el domingo de Aragón para disculparse y nada más. Somos dos pilotos y tenemos dos perspectivas distintas. Es todo respetable. Teníamos la misma ambición en el mismo momento", concluyó el vigente campeón del mundo de MotoGP.