La huelga lleva a Boeing al borde del precipicio financiero: las agencias de "rating" acercan más su deuda a "bono basura"
Boeing se acerca a un precipicio financiero de consecuencias desconocidas. La huelga que iniciaron semanas atrás 33.000 de sus trabajadores de Estados Unidos ha paralizado en buena medida su producción y está deteriorando su posición financiera a pasos agigantados.
Cada día de huelga está costando a la compañía aeronáutica estadounidense unos 100 millones de dólares -unos 91 millones de euros- que se suman a los 8.000 millones de euros de liquidez que los analistas calculan que la compañía "quemó" en los seis primeros meses del año por crisis como la generada por el desprendimiento de parte del fuselaje de uno de sus aviones de la compañía Alaska Airlines. Y eso, en una empresa que ya arrastraba una deuda de 58.000 millones de dólares a 30 de junio, es mucho.
Cuando la huelga se declaró el pasado 13 de septiembre, las agencias de riesgo, Fitch, Moodys y S&P, ya advirtieron de que, si se prolongaba en el tiempo, podría acabar afectando a su "rating", la nota con la que califican la solvencia de una empresa para devolver el dinero que toma prestado en el mercado. Y S&P ha dado ahora un paso más en sus advertencias al colocar la deuda de la compañía en vigilancia negativa, lo que la acerca un poco más al "bono basura".
Mayores costes de financiación
Esta rebaja tendría unas implicaciones muy relevantes para las finanzas de Boeing puesto que le supondría tener que financiarse a unos intereses más elevados. Por este motivo, y para defender su calificación, la compañía estudia realizar una ampliación de capital por 10.000 millones de dólares una vez que se conozca el alcance total del paro laboral.
Ahora mismo, Boeing tiene una deuda de 4.000 millones de dólares (3.650 millones de euros) con vencimiento a 2025, y otra de 8.000 millones dólares (7.300 millones de euros) con vencimiento a 2026, según Moody's Ratings.
Las noticias sobre los peligros para su deuda pueden servir de acicate a Boeing para tratar de encontrar una solución a un conflicto que, sin embargo, se ha enquistado y parece no tener una solución a la vista. Hasta el punto de que la propia compañía ha retirado la oferta de subida salarial del 30% para los próximos cuatro años tras el fracaso de las negociaciones con los sindicatos que llevan varias semanas de huelga, según informa este miércoles Bloomberg.
El fabricante, que había dado de plazo hasta el pasado 27 de septiembre para que los trabajadores le dieran una respuesta a la subida planteada, ha acusado a los sindicatos de no realizar "demandas negociables". Dicha oferta mejoraba la anteriormente rechazada por los sindicatos, que planteaba un alza del 25%, al tiempo que ofrecía un bono de 6.000 dólares (unos 5.358 euros) a los trabajadores por ratificar esta propuesta para un nuevo convenio colectivo y otros beneficios como restituir los bonos anuales.
Ya antes de este difícil contexto generado por la huelga, la compañía llevaba un difícil año. En el primer semestre del año, Boeing acumuló unas pérdidas de 1.794 millones de dólares, 1.220 millones más que en el mismo periodo de 2023. Además, hasta septiembre, completó un 44% menos de entregas con respecto al mismo periodo del año anterior, hasta las 291 entregas.