¿Qué santo se celebra hoy, 24 de diciembre? Todo lo que debes saber del santoral de hoy
El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, el santoral representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.
¿Qué santos se celebran hoy, martes 24 de diciembre?
- San Gregorio de Spoleto: Mártir que sufrió persecución por su fe en el siglo III.
- San Irmina de Oeren: Abadesa benedictina del siglo VII en lo que ahora es Alemania.
- San Tarsila: Virgen romana del siglo VI, tía del Papa San Gregorio Magno, conocida por su piedad y vida de oración.
- Santa Adela de Pfalzel: Fundadora de un monasterio en Pfalzel, cerca de Tréveris (Alemania), en el siglo VII.
San Delfín de Burdeos: Vida y Pontificado
San Delfín de Burdeos fue un destacado obispo de la ciudad de Burdeos en el siglo IV, nacido probablemente en la región de Aquitania (actual Francia). Fue un ferviente defensor de la ortodoxia cristiana en una época marcada por la controversia arriana, que negaba la divinidad de Cristo. Delfín trabajó incansablemente para fortalecer la fe católica y guiar a su comunidad en tiempos de desafíos teológicos y sociales.
Participó activamente en el Concilio de Zaragoza (380), donde se reunieron obispos de Hispania y la Galia para condenar las herejías priscilianistas. Bajo su liderazgo, la diócesis de Burdeos se convirtió en un importante centro de fe, atrayendo a otros líderes religiosos influyentes, como el futuro poeta cristiano Paulino de Nola, quien fue bautizado por Delfín.
Canonización y Legado
San Delfín fue venerado como santo poco después de su muerte debido a su vida de santidad, su dedicación pastoral y su defensa de la fe. Aunque no existe un registro formal de su canonización, como ocurría con los procesos de canonización posteriores, su culto se extendió rápidamente entre los fieles de la región.
El legado de Delfín incluye el fortalecimiento de la Iglesia en el suroeste de Francia y su contribución a la expansión del cristianismo en Aquitania. Su figura es recordada por su valentía al enfrentar divisiones doctrinales y por su papel como mentor espiritual. Su fiesta litúrgica se celebra el 24 de diciembre, en vísperas de la Navidad, subrayando su testimonio de esperanza y fe en Cristo.
Exilio y Muerte
Aunque su vida estuvo marcada por la actividad pastoral, San Delfín también enfrentó momentos de dificultad, entre ellos el exilio. Las tensiones religiosas y políticas de su tiempo lo llevaron a dejar temporalmente su sede episcopal. Según algunos relatos, fue forzado a abandonar Burdeos debido a las persecuciones relacionadas con los conflictos arrianos.
Falleció en paz alrededor del año 403, probablemente en Burdeos, donde regresó después de su exilio. Su cuerpo fue enterrado en la ciudad, y su tumba se convirtió en un lugar de peregrinación para los fieles que buscaban su intercesión. Su vida sigue siendo un modelo de fe, perseverancia y liderazgo para la Iglesia.