El Barcelona de Hansi Flick y un mes y medio fatal
El Barcelona, líder durante la mayor parte de la primera vuelta, ha cerrado el año en la tercera plaza a tres puntos del Atlético, a dos del Real Madrid y con un partido más que los dos equipos de la capital. La derrota en Montjuic ante los de Simeone ha agravado un mes de diciembre en que el Barça ha dejado de ser el equipo fiable que comenzó la temporada.
A diferencia de las derrotas sufridas ante la Real Sociedad, Las Palmas o el Leganés, el Barça jugó ante el Atlético con la energía que había definido al equipo de Flick en el primer tramo del curso. Frente a los rojiblancos, el Barcelona presionó de forma efectiva, recuperó balones en campo rival, dominó la posesión con ritmo y generó ocasiones de gol, pero le faltó acierto. El equipo azulgrana disparó 19 veces, siete entre los tres palos, mientras que el Atlético realizó cinco remates, cuatro de ellos a puerta y dos de ellos se convirtieron en los goles de De Paul y Sorloth.
Ante la baja por lesión de Lamine Yamal, Pedri se echó el equipo a la espalda y demostró que es el jugador más en forma del plantel. El centrocampista canario marcó el tempo del primer acto, indetectable entre líneas, y firmó el 1-0. Tras el paso por vestuarios, regaló asistencias que sus compañeros no supieron aprovechar ante el guardameta Oblak, que evitó el segundo gol del propio Pedri en los minutos finales.
Si Pedri no hace más que crecer en los últimos encuentros, Lewandowski y Dani Olmo han ido de más a menos. Dos de las claves en el gran arranque liguero del Barça han perdido frescura y precisión. El polaco ha pasado de marcar 14 goles en las primeras 11 jornadas, a sólo dos en los siete duelos ligueros más recientes. Y el egarense, autor de tres dianas en sus tres primeros partidos, no anota en Liga desde el 3 de noviembre, y ante el Atlético perdió la titularidad en beneficio de Gavi.
El Cholo dio otra de las claves en la conferencia de prensa posterior a la victoria en Montjuic: «Cuando en los inicios de partido el Barcelona no rentabiliza su gran esfuerzo con goles, pasan otras cosas». Y, en efecto, el conjunto rojiblanco resistió en los tramos de mayor dominio azulgrana, se estiró con el avance de los minutos y aprovechó los espacios que dejaba un rival cansado para contragolpear. El ejercicio de resistencia del Atlético acabó por castigar al Barça.
Si hay una posición en la que el Barcelona flaquea es en los laterales. Los dos goles del Atlético surgieron en dos envíos profundos por las bandas, el punto débil de la zaga barcelonista en los últimos encuentros. Este es un aspecto a corregir si el equipo de Flick pretende mejorar su rendimiento defensivo, pues no deja la portería a cero en Liga desde el 0-4 ante el Real Madrid del 26 de octubre en el Santiago Bernabéu. Desde entonces, doce goles encajados por Iñaki Peña en ocho jornadas.
Otro de los puntos débiles es la aportación del banquillo. Marcus Sorg, que ejerció de primer entrenador por la sanción de Hansi Flick, introdujo en la última media hora a Dani Olmo, Ferran Torres y Eric García, pero no logró alterar el curso del partido. En cambio, con sus modificaciones, el Atlético ganó solidez en defensa y sumó recursos para atacar en transición, como demostraron Nahuel Molina y Sorloth, dos suplentes, en la acción del 1-2 definitivo.
Tras cosechar once victorias y una derrota en las primeras doce fechas, el Barcelona sólo ha ganado en una de las siete jornadas de Liga más recientes, 1-5 en Mallorca. Empató en los campos del Celta (2-2) y el Betis (2-2), y ha perdido en los últimos tres partidos en casa ante la UD Las Palmas (1-2), el Leganés (0-1) y el Atlético de Madrid (1-2), algo que no sucedía desde la temporada 1965-66. Ha sumado cinco puntos en siete jornadas y por eso ahora es tercero.