La flota de guerra china alcanza ya los 70 submarinos y 45 destructores
La flota naval de China ha crecido hasta alcanzar los 360 buques de guerra con capacidad para crecer en el corto plazo hasta llegar a los 400-440 buques y desafiar así a la poderosa Armada de Estados Unidos. Así lo pone de manifiesto un informe anual del Instituto de Investigación de Defensa y Seguridad Nacional taiwanés sobre el desarrollo militar y político del Partido Comunista Chino firmado por el investigador Chen Liang-chih.
Los buques de guerra principales de la Armada de China incluyen tres portaaviones, 45 destructores, 40 fragatas, 70 submarinos, 40 buques de asalto anfibio y 60 buques auxiliares, según el informe, que deja fuera del listado barcos más pequeños, como barcos lanzamisiles o fragatas de menor tonelaje.
El informe llama la atención sobre último buque de guerra de China, el portaaviones Fujian, que se encuentra actualmente en pruebas en el mar y que está equipado con un avanzado sistema de catapulta electromagnética, algo con lo que sólo están equipados los portaaviones estadounidenses de clase Ford.
Además, la Armada china ya cuenta con tres buques de asalto anfibio de clase Tipo 075, y se espera que lance el nuevo modelo más avanzado, Tipo 076, a lo largo de este año. Estos nuevos barcos podrían tener la capacidad de lanzar aviones de ala fija y drones, lo que reforzaría la capacidad de Pekín para llevar a cabo asaltos anfibios.
¿Cómo ha sido China capaz de tener esta flota en tan poco tiempo? Parte del éxito se debe -según el informe- a la decisión del Gobierno de construir varios astilleros de clase mundial. China cuenta actualmente con 13 astilleros. Pero lo que asombra es la dimensión de estas instalaciones. "Uno de los astilleros de China es tan grande que su capacidad supera la de todos los constructores navales estadounidenses juntos", ha dicho Jerry Hendrix, un capitán retirado de la Marina.
Para el futuro, el informe prevé una mayor rivalidad entre las armadas de Estados Unidos y China, con flotas más grandes, buques y sistemas de armas más avanzados desplegados y ejercicios militares de mayor envergadura. Es probable que esta competencia tenga efectos importantes en la región Asia-Pacífico.