Ayuso liderará el veto a llevar a las aulas el plan sobre Franco
El programa «España en Libertad», organizado por el Gobierno con motivo del 50 aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco, contiene un conjunto de actividades que está previsto que lleguen a los colegios e institutos. Entre ellas figura, por ejemplo, la celebración de un concurso nacional entre el alumnado de ESO y Bachillerato sobre la conmemoración de la muerte de Franco, sin que todavía se conozcan más detalles al respecto.
También un «encuentro con profesorado de centros de Enseñanza Secundaria Obligatoria» o lo que denominan la presentación a la comunidad educativa del recurso sobre Memoria Democrática «Amiga, date cuenta», que es un proyecto de documentación, geolocalización y creación de un mapa interactivo que «visibiliza espacios vinculados a la Memoria Democrática de las mujeres en el contexto español».
Esta iniciativa de llevar al ámbito educativo el plan de celebración de la muerte de Franco, no consensuado con el principal partido de la oposición, tendrá en contra el veto de la comunidad que preside Isabel Díaz Ayuso, y es de esperar que las demás autonomías con gobiernos populares sigan la misma línea que ella.
En Madrid existe una norma para evitar «el adoctrinamiento en los colegios, que establece que todas las actividades extracurriculares que programa cada centro educativo, en el marco de su autonomía, deben ser previamente comunicadas para que los padres puedan conocerlas antes de realizar la matrícula. Es decir, si algún centro se adhiere, tiene que programarlo con antelación y ponerlo en conocimiento de las familias. La posición de las comunidades del PP suena tajante, y anticipa, en todo caso, un nuevo choque institucional: «Tenemos mecanismos para evitar actividades de adoctrinamiento político en los colegios».
Sobre los citados actos que se han incluido ya en el programa de actividades en el plano educativo, la previsión, por tanto, es que no participe ninguna comunidad del Partido Popular. La sorpresa sería justamente que sucediera lo contrario. Y lo que alegarán es que lo que hay detrás de hablar de la represión franquista es ese citado «proceso de adoctrinamiento».
Desde el Ministerio de Educación anticipan, sin embargo, que hay propuestas, como los concursos, que pueden ser asumidas directamente por ellos. Pero para otras de las actividades deberán abrir un diálogo con los directores de los centros, que podrán decidir si acogen o no las iniciativas. Y, por encima de ello, estará el ejercicio de sus respectivas competencias en la materia por parte de los gobiernos autonómicos.
Tanto PP como Vox coinciden en que el plan del Ejecutivo de trasladar a las aulas su proyecto de enseñanza sobre la etapa franquista es un proyecto de adoctrinamiento.
El próximo 20 de noviembre se cumplirán 50 años de la muerte de Franco, en 1975, y es la fecha que ha elegido el Gobierno, de manera unilateral, para celebrar el inicio de la Transición española a la democracia.
Los actos previstos incluyen exposiciones, muestras en museos, proyección de documentales, una serie de seis capítulos de RTVE, coloquios, conciertos, actividades en redes sociales... El plan diseñado por La Moncloa afecta no solo a instituciones españolas, sino también internacionales, como el Instituto Cervantes o embajadas como la de Argel o la alemana.
El PP no participará de estos actos, que tampoco han sido acogidos con entusiasmo por otras fuerzas políticas por su carácter unilateral. En cuanto a los expresidentes del Gobierno, solo José Luis Rodríguez Zapatero no se ha opuesto, mientras que Felipe González ha criticado la iniciativa públicamente sin tapujos.
Las críticas más duras han venido de los partidos de la oposición. El PP cree que se trata de una cortina de humo para tapar los casos de corrupción que afectan al PSOE, mientras que la presidenta Ayuso ha acusado al presidente del Gobierno de querer llevar la violencia a las calles y Vox habla de «necrofilia absurda.