Violencia en Corea del Sur tras oficializarse la orden de arresto del presidente Yoon Suk Yeol
La situación en Seúl se tornó caótica durante el fin de semana después de que un tribunal emitiera de forma oficial una orden de arresto para el suspendido presidente Yoon Suk Yeol, acusado de intentar instaurar un estado de emergencia mediante la declaración de ley marcial.
Desde la noche del sábado, miles de manifestantes, en su mayoría fervientes partidarios de Yoon, se congregaron frente al Tribunal del Distrito Oeste de Seúl, donde el mandatario asistía a una audiencia sobre su situación legal. La protesta se transformó en violencia cuando algunos participantes intentaron romper las ventanas del tribunal y agredieron a las fuerzas del orden, llevando a la detención de al menos 85 personas.
La Agencia Nacional de Policía calificó el incidente como “un grave desafío al estado de derecho” y anunció la creación de un equipo especial para investigar y arrestar a todos los implicados en los disturbios. “Tomaremos medidas estrictas, incluyendo la detención física de los líderes de la revuelta y de todos los que participaron en estas actividades ilegales”, señalaron las autoridades.
Es la primera vez en la historia reciente de Corea del Sur que un tribunal es objeto de un ataque agresivo en respuesta a una decisión judicial. Los disidentes, que se enfrentaron a la policía con escudos y otros objetos, exigían la liberación de Yoon, quien se encuentra en un Centro de Detención por no presentarse a tres citaciones previas.
El clima de tensión se intensificó tras la decisión del tribunal, que se conoció alrededor de las 3 a.m. del domingo, provocando que algunos asistentes a la protesta se infiltraran en el edificio del tribunal, donde vandalizaron propiedades y agredieron a agentes de la ley.
La violencia ha suscitado una fuerte condena por parte del presidente interino, Choi Sang-mok, quien expresó su “profunda preocupación” por los acontecimientos y ordenó una investigación exhaustiva.