El Atlético levanta ampollas
Tenía que llegar en algún momento y llegó. La derrota me refiero. Lo hizo en el lugar más inesperado y realmente sin merecerlo, pero el Atlético salió derrotado de Butarque. El equipo rompió así la mejor racha de su historia que desde ya está fijada en 15 victorias consecutivas.
En este curioso deporte llamado fútbol, los rojiblancos han ganado partidos sin merecerlo, gracias en parte a una efectividad en ataque sublime, como ocurrió en Vigo, Bilbao, París oBarcelona. El problema es que cuando la pelota se niega a entrar, los partidos se terminan complicando. En Leganés, un buen Dimitrovic, tres balones a los palos y hasta un penalti fallado por Griezmann en el descuento, evitaron que el equipo colchonero rascara algún punto.
Inesperada fue también la polémica que se generó al final del encuentro, cuando gracias al VAR no se fue al limbo un claro penalti a favor del Atlético. La reacción de Borja Jiménez, entrenador local, fue llamar a Simeone llorón, por unas declaraciones del entrenador argentino en la conferencia de prensa previa al ser preguntado por el polémico arbitraje del Real Madrid-Celta de Copa. «Lleva pasando lo mismo 100 años, no sé de qué se extrañan». Así, sin más. Claro y conciso, el Cholo puso sobre la mesa lo que piensa todo amante del fútbol salvo los aficionados madridistas. Estos piensan que los árbitros les han impedido ganar todos los títulos jugados a lo largo de la historia. En este debate, procedente de tiempos ancestrales y que durará eternamente mientras sigan dándose casos como el del Bernabéu ante los vigueses, nadie va a convencer a nadie. Ancelotti, incluso Ramos o Morata, hablan con conocimiento de causa, pues saben cómo les pitan cuando llevan el escudo blanco en el pecho y cómo lo hacen cuando juegan contra él, pero lo sorprendente es que el entrenador del Leganés se meta en esta guerra en pleno partido de su equipo. El calamitoso lanzamiento de Griezmann se la puso botando para pedir perdón, pero es difícil pensar que su reacción hubiera sido igual si el Atlético hubiera empatado.