El despido objetivo: la razón por la que te pueden echar del trabajo sin tener en cuenta tus actos en la empresa
En la vida empresarial como trabajador es importante tener en cuenta tanto los derechos laborales que uno tiene como los riesgos que pueden poner en peligro la relación de la empresa con el empleado. En este sentido entra lo que se conoce como despido, en la mayoría de casos, siempre y cuando el trabajador no lleve a cabo una imprudencia, este será indemnizado con una cantidad equivalente a su estancia dentro de su actividad laboral en la compañía. No obstante quedan recogidos en los derechos de la empresa como entidad algunas excepciones donde la reducción de plantilla viene condicionada por factores económicos o sociales, entre otros.
Siempre que rescinden el contrato de un compañero, la incertidumbre se apodera del debate en el entorno laboral que, de algún modo, se acaba materializando en una mezcla entre pena e inseguridad por si nuestro nombre fuera el siguiente en la rampa de salida. Por el contrario, algo que no mucha gente conoce es que dicha destitución puede que no tenga una estricta relación con los actos que el trabajador pueda desempeñar en el día a día. En resumen, tu suspensión no depende de ti necesariamente sino de la situación de la empresa. Este fenómeno recibe el nombre de "despido objetivo", y cada vez es más frecuente.
Pero este caso ha de ser anunciado con un sustento importante detrás que justifique el cese del trabajador y se encuentre dentro de las directrices que establece el marco legislativo. Es decir, no es una decisión que se pueda tomar a la ligera sino que debe ser empleada en casos extremos donde la subsistencia de una de las partes que sostienen la empresa esté en peligro. Por tanto, la deconstrucción de esta decisión se apoya en diversas variables. Desde la productividad hasta el factor técnico pasando por la organización corporativa.
El despido objetivo: los derechos de la empresa para destituir al personal
Si la empresa en tu despido alega causas objetivas, como pérdidas económicas, condiciones relacionadas con tu puesto de trabajo o la imposibilidad de mantenerte en plantilla siempre tendrá que ser validada por la ley y transmitida al individuo siguiendo unos parámetros determinados. Si alguna de estas pautas no se cumplen, la compañía estaría actuando fuera del marco legal, por lo que, lo recomendable es ponerse en manos de un profesional del derecho para que te asesore respecto a las posibilidades que tienes en cada situación. Pero nunca hay que dejar de lado el hecho de que la empresa aboga por el bien de la misma y a su juicio estas causas pueden estar vigentes.
¿Cómo se debe ejecutar correctamente un despido objetivo?
Para que el procedimiento no presente ninguna incógnita, la corporación que lleva acabo el despido debe de seguir unos plazos dictaminados por ley. En primer lugar, se debe realizar un preaviso al trabajador que generalmente es de 15 días. cuando se realice el despido formalmente este deberá ser por escrito esclareciendo las causas objetivas por las procede. También deberá incluir la indemnización que cobrará el empleado, la cantidad es de 20 días de salario por año de servicio hasta completar un máximo de 12 mensualidades. Asimismo, la empresa deberá de entregar la correspondiente documentación para tramitar el desempleo.
Tipos de despidos objetivos
Dentro de todos los arquetipos de despido objetivo que una empresa debe tener en cuenta a la hora de expulsar a sus trabajadores destacan estas siete causas principales:
- Por causas económicas: la empresa atraviesa un momento de pérdidas de beneficios que afectan gravemente a su economía. Suele ser muy repentino pues en algunos casos se trata de un espacio de beneficios que desaparece inesperadamente, como un cliente.
- Por causas organizativas: la reestructuración de la empresa, el cambio de rol en los puestos de trabajo o una modificación en la visión de la rutina son alguna de las variables que intervienen.
- Por causas productivas: los cambios en el mercado contribuyen a que la demanda de lo que se comercializa sufra variaciones en su desarrollo y esto puede conllevar a la reducción de personal.
- Por ineptitud sobrevenida: tu puesto de trabajo se ve afectado por alguna causa externa, como una enfermedad, y tu actividad laboral se ve condicionada por la misma.
- Por causas técnicas: en este caso la implementación de nuevas tecnologías deja de lado la necesidad de algunos puestos y conlleva a despidos de sus respectivos empleados.
- Por falta de adaptación: es otra variación del antes mencionado. Por ejemplo, si se instala una nueva herramienta con la que trabajar y el individuo no logra adaptarse entorpeciendo su ocupación.