O'Leary (Ryanair) vuelve a llamar ministro "loco" y "estúpido" a Bustinduy y lo viste de payaso para promocionar billetes a bajo coste
Ryanair recrudece su ofensiva contra el Gobierno español, tanto con Aena, por las "excesivas" tarifas aeroportuarias en los aeropuertos regionales, donde elimina 12 rutas y 800.000 asientos para este verano, como con el Ministerio de Consumo, por su histórica multa de 179 millones interpuesta a cinco aerolíneas de bajo coste (Ryanair, Vueling, EasyJet, Norwegian y Volotea) por cobrar por el equipaje de mano. El presidente y fundador de Ryanair, Michael O'Leary, ha vuelto a llamar "comunista", "loco", "estúpido" y "payaso" este martes al titular de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, y le ha instado a retirar las multas "ilegales" por el equipaje de mano, ya que son contrarias tanto a la legislación de la UE como a la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE en el caso Vueling de 2014.
Para demostrar que Ryanair ofrece los precios más bajos, que subirían en al menos 2 euros por billete si las multas se confirman, Ryanair ha puesto hoy a la venta 179.000 plazas por solo 19,99 euros por trayecto. "Estas tarifas tan bajas tan solo estarán disponibles durante tres días en la web de Ryanair, por lo que los pasajeros deberían reservarlas hoy antes de que las multas ilegales de Bustinduy aumenten el precio de los billetes en España", ha argumentado O'Leary. El presidente de Ryanair ha promocionado esta campaña vistiendo a una figura de Bustinduy de payaso y poniéndole un delantal que dice "Yo (corazón) sube precios".
“Ryanair transportó el año pasado 20 veces más gente en España que la que votó por este payaso. Redujimos un 8% los precios el año pasado, 60 millones de pasajeros nos eligieron, ahorrándoles más de 300 millones de euros”, dijo el presidente de Ryanair. O'Leary, además, subrayó que la cruzada de Bustinduy solo se enfoca en las aerolíneas low cost, cuando agencias online de viajes como Booking, eDreams o Vola aplican recargos del 100% sobre el precio de los billetes. “Haz algo útil por los consumidores y ve detrás de estas agencias [...] Y si a los consumidores no les gustan los precios de Ryanair, que vuelen con Iberia, a la que Bustinduy no ataca”, señaló. “Bajo la maldita ley europea no tiene derecho a impedir que las aerolíneas fijen sus precios”, insistió O'Leary.
Con estos exabruptos, la primera aerolínea de Europa y España por número de pasajeros vuelve a meter presión a Pablo Bustinduy. La aerolínea irlandesa de bajo coste es la mayor perjudicada por la sanción de Consumo, con 107,8 millones de euros y está convencida de que los tribunales le darán la razón y revocarán la multa. Ryanair apoya su argumentario en dos pilares: el Reglamento 1008/2008 de la UE y la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de septiembre de 2014 en el caso Vueling. Por un lado, la norma europea garantiza a todas las aerolíneas de la UE la libertad de fijación de precios e impide a los gobiernos nacionales interferir en las políticas de precios de las aerolíneas para asientos y otros servicios como el equipaje.
Por otro, la sentencia del TJUE de 2014 falló en contra del Instituto Galego de Consumo de la Xunta de Galicia, que pretendía ampararse en la Ley 48/1960 de Navegación Aérea española de 1960 para imponer una multa contra Vueling por cobrar por el equipaje de mano. En aquel caso, el TJUE argumentó que el reglamento europeo se opone a cualquier ley nacional que obligue a las compañías aéreas a transportar al pasajero y su equipaje sin que sea posible cobrar un suplemento de precio por transportar dicho equipaje. En esta sentencia, el único requisito que se exige a las aerolíneas es que deben proporcionar a todos los pasajeros un límite razonable de equipaje de mano gratuito, pero sin especificar el tamaño. Ryanair ya lo hace permitiendo una mochila o bolso de hasta 40 x 20 x 25 cm.
Por ello, O'Leary considera que queda demostrado fehacientemente que el intento del ministro Bustinduy de imponer multas por equipaje a las principales aerolíneas que prestan servicio en España (al amparo de esta obsoleta ley de 1960) son ilegales y contrarias a la legislación de la UE y a las sentencias del Tribunal del TJUE.
El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha respondido a Ryanair asegurando que "ninguna campaña de presiones y ningún insulto" le va a "amedrentar" en esa tarea. Así lo ha manifestado durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, en el que ha insistido que esta sanción se basa en una resolución de una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea del año 2014 y, por tanto, se encuentra "en pleno respeto también de la legislación comunitaria". "Yo soy el Ministro de Consumo, mi obligación es defender los derechos de los consumidores españoles. Eso he hecho y eso voy a seguir haciendo con total determinación allí donde haga falta", ha añadido en su intervención.
El intercambio de reproches entre la aerolínea y el Gobierno se desató después de que Ryanair anunciase un ajuste de capacidad de 800.000 plazas en aeropuertos regionales de cara al verano en respuesta a la, a su juicio, errónea política tarifaria de Aena. En cuanto a este recorte de plazas por las tasas de Aena, a la que O'Leary volvió a llamar "monopolio", dijo que, pese a ello, la oferta total de Ryanair para el verano 2025 en España crecerá un 3% a nivel nacional. No obstante, insistió en que si las altas tasas aéreas y la falta de incentivos siguen lastrando a los aeropuertos regionales tendrán que centrarse en otros destinos. Este verano Ryanair desaparece de los aeropuertos de Jerez y Valladolid y reduce el tráfico en Vigo, Santiago, Zaragoza, Asturias y Santander.