Los dos hermanos de un hombre muerto en Somiedo en 2015 pudieron dejarle morir
La titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Gijón considera que los dos hermanos del hombre cuyo cadáver fue encontrado hace una década junto a una carretera de Somiedo, en un paraje de alta montaña en Asturias, pudieron dejarle morir, por lo que se les atribuye inicialmente un delito de homicidio por omisión, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).
El juzgado ha vuelto a tomar declaración como investigados al hombre y la mujer una vez que las huellas dactilares han confirmado que el cadáver del hombre, que era dependiente por un alto grado de discapacidad, corresponde con el hermano de los detenidos, que permanecen en prisión preventiva desde la semana pasada y que pudieron haber cobrado su pensión durante todos estos años, informa Efe.
De acuerdo al criterio de la Fiscalía, el juzgado ha decido mantener a ambos hermanos en prisión preventiva, después de que la mujer haya relatado que su hermano, cuya muerte se declaró natural en la autopsia que se le realizó entonces, estuvo encontrándose mal durante varios días antes de su fallecimiento, por lo que pudieron dejarle morir sin prestarle atención.
El juzgado también les atribuye un delito de fraude de prestaciones de la Seguridad Social en un supuesto agravado por lo elevado de las cantidades cobradas en estos diez años, superior a los 300.000 euros, y otro de falsedad documental y estafa. Hasta ahora se les imputaba detención ilegal.
El Juzgado de Instrucción número 4 de Gijón ordenó la semana pasada el ingreso en prisión provisional de los dos hermanos, en principio por un delito de detención ilegal por no haber atendido durante años a los requerimientos de la administración autonómica para que llevasen a su hermano a una valoración de los servicios sociales. Ante la identificación positiva obtenida por las huellas dactilares, la magistrada les ha tomado este miércoles de nuevo declaración y ha decidido cambiar la calificación de los hechos.
Ambos hermanos ingresaron la semana pasada en el Centro Penitenciario de Asturias después de haber sido detenidos en el País Vasco, adonde se habían desplazado tras conocer que estaban siendo buscados.
El juzgado dictó en octubre una orden de detención después de que se comprobase que ninguno de los hermanos se encontraba en la vivienda que figuraba como su residencia habitual.
Tras su localización y detención en el País Vasco, los hermanos alegaron que su hermano había fallecido hace una década y que su cadáver se correspondía con el hallado el 11 de enero de 2015 por unos montañeros cerca de una carretera en Somiedo.
Según afirmaron, su hermano falleció por causas naturales y lo trasladaron hasta ese paraje de alta montaña porque no sabían qué hacer con el cuerpo.
La autopsia realizada entonces al cadáver, cuya identidad seguía siendo una incógnita hasta ahora, descartó que la muerte hubiera sido violenta.