El truco infalible de Luis Enrique para perder más grasa al entrenar
Luis Enrique se encuentra en un momento dulce en el PSG. El Paris Saint-Germain tiene pie y medio en los octavos de final de la Champions League después de superar con contundencia al Brest (0-3) en Guingamp en la ida del play-off de la competición reina. Guiados por un Ousmane Dembélé estelar, los parisinos mostraron un gran nivel colectivo. En La Liga lideran la clasificación a 10 puntos del Marsella.
Pero más allá de sus logros como técnico, el asturiano suele convertirse en protagonista en redes sociales por revelar las rutinas que le permiten mantenerse en un gran estado de forma a sus 54 años.
"Movilidad cada media hora"
Hace unos meses, Luis Enrique fue tendencia en las redes sociales por una peculiar rutina que implementa para mantener su estado físico. En un corte publicado de su documental, “No tenéis ni p idea”*, transmitido por Movistar+, el técnico español muestra cómo interrumpe su jornada de trabajo cada 30 minutos para realizar ejercicios físicos, una costumbre que él llama su “movilidad cada media hora”.
En una de las escenas compartidas por el canal de streaming, durante una reunión con sus colegas, el reloj del entrenador del París Saint-Germain suena recordándole que es hora de desplazarse: “Cada media hora hay que moverse, todos los grupos musculares. Estamos en el despacho unas 8 o 10 horas, somos lo que se llama sedentarios activos”, explica el asturiano mientras comienza a realizar flexiones, sentadillas y ejercicios de tríceps en el mismo lugar. Y es que el técnico no escatima en esfuerzos para mantener un excelente nivel físico.
Sus trucos para mantenerse en forma
El seleccionador, además de ser apasionado en la práctica del ciclismo, le gusta correr y es una persona que se cuida bastante la alimentación. En este sentido ha revelado en varias ocasiones de beneficio de ingerir huevos o su afición por el el ayuno intermitente.
“Lo hago de manera espontánea, cuando me apetece. No tengo un hábito, va en función de cómo me sienta. Lo que si hago es que si no tengo hambre no como o no desayuno. Al final estamos en una sociedad que está acostumbrada y es un hecho ya más social. Si no tienes hambre no comas, tranquilo. Si no pasa nada. Afortunadamente en nuestro mundo no se muere nadie de hambre", afirmó en uno de sus streaming.
Pero una de los secretos desvelados por el técnico que más llamó la atención es su truco para perder más grasa al entrenar. “Para hacer deporte lo hago en ayunas y al acabar de entrenar si me apetece desayuno o bien aguanto hasta la comida. Va según cómo me siento. Al principio me lo marqué como algo concreto, ahora va según el feeling que sienta”, dice.
¿Es realmente efectivo?: esto dice la ciencia
El hecho de ejercitarse en ayunas ha sido objeto de numerosos estudios científicos que analizan las ventajas y desventajas de este método. Lo cierto es que la actividad física en ayunas tiene, en efecto, algunas ventajas pero solo si se cumplen ciertas condiciones; de lo contrario, puede ser contraproducente.
Varios estudios han demostrado que se quema más grasa corporal al hacer deporte antes de desayunar. Uno de los más importantes data fue el realizado por científicos de Túnez que evaluaron los efectos de la actividad física en hombres durante el ramadán, el periodo durante el cual los musulmanes hacen ayuno en las horas de luz natural.
De acuerdo con algunos expertos, hacer ejercicio con el estómago vacío acelera la quema de calorías y el proceso de perder peso.
Un estudio publicado en el British Journal of Nutrition incluso dice que, quienes hacen ejercicio sin comer pueden llegar a quemar hasta un 20 por ciento más de grasa que los que comían antes. Otro de la Revista Internacional de Nutrición Deportiva y Metabolismo del Ejercicio encontró algo similar, apoyando la teoría de que esto puede reducir más el porcentaje de grasa y, por lo tanto, el peso que cuando entrenas después de desayunar o comer.
Esto se debe a que la falta de comida obliga a tu cuerpo a utilizar otros recursos para realizar las actividades físicas, que en este caso es la grasa acumulada.
Sin embargo, esta práctica también tiene sus desventajas. El ejercicio en ayunas puede hacer que pierdas músculo al mismo tiempo que la grasa, además de que puede empezar a quemar proteínas en lugar de grasa si te quedas sin recursos. Además, cuando se entrena en ayunas, el rendimiento físico es menor. Por eso, el ejercicio después de un largo periodo sin consumir alimentos debe ser moderado.