La magia del té de hibisco para mejorar tu salud naturalmente
Investigaciones recientes, como las de la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Harvard, respaldan los beneficios del hibisco para ayudar a reducir la presión arterial y mejorar la salud cardiovascular gracias a sus antioxidantes y las antocianinas. Otros estudios indican que el consumo regular de este té puede contribuir a disminuir los niveles de colesterol LDL y triglicéridos.
Pero al parecer según los investigadores los beneficios para la salud que proporciona el consumo de hibisco son múltiples; su poder antiinflamatorio ayuda a la digestión y también puede contribuir a un sueño reparador. Asimismo beberlo a la temperatura adecuada, especialmente caliente, potencia su acción termogénica, lo que puede ayudar a reducir la grasa abdominal.
Por otra parte, los estudios afirman que el té de hibisco no solo aporta vitamina C, sino que también tiene efectos digestivos, aperitivos y laxantes, a la vez que es efectivo para tratar la acidez gástrica, espasmos estomacales y gastroenteritis, y asimismo, se ha demostrado que mejora la circulación sanguínea.
Cómo preparar el té de hibisco
Para hacer una infusión de té de hibisco se recomienda utilizar tres cucharadas de pétalos secos o 30 gramos de flores frescas por litro de agua. Primero, se hierve el agua y una vez retirada del fuego, se añaden los pétalos y en forma opcional se pueden agregar hasta cinco cucharaditas de azúcar. Luego, se tapa la mezcla y se deja reposar durante diez minutos. Este té se puede disfrutar tanto caliente como frío, y una opción refrescante es añadir jugo de lima o limón y cubitos de hielo.
Se sugiere tomar el té después de las comidas y limitar el consumo a dos tazas al día. Beberlo caliente puede maximizar sus efectos digestivos y relajantes.
Precauciones y contraindicaciones
A pesar de sus múltiples beneficios, el consumo de hibisco no es adecuado para todos. Medline Plus advierte que las mujeres embarazadas y en período de lactancia deben evitar su uso. Además, aquellas personas que estén bajo tratamientos médicos prolongados, especialmente con medicamentos como losartán para la presión arterial o tratamientos para la diabetes, deben consultar a un médico antes de consumir hibisco. Se recomienda también evitar el hibisco dos semanas antes y después de cualquier cirugía.
Los ensayos clínicos han demostrado que el hibisco tiene un perfil de seguridad favorable, pero es importante tener precaución y buscar la asesoría de un profesional de la salud antes de comenzar a ingerirlo. Una vez tomados estos recaudos puede ser una excelente opción para aquellos que buscan mejorar su bienestar, y deseen incluirlo en su dieta y rutina diaria.