Exjefe del Cártel del Golfo, Osiel Cárdenas, sale de prisión
El narcotraficante mexicano Osiel Cárdenas Guillén, exjefe del Cártel del Golfo y fundador de la banda criminal Los Zetas, salió de una cárcel de Estados Unidos este viernes, informó a la AFP el Buró Federal de Prisiones.
Cárdenas Guillén fue puesto en libertad 21 años después de ser detenido y 17 años después de haber sido extraditado a Estados Unidos, donde se declaró culpable de tráfico de droga, lavado de dinero y extorsión a agentes federales estadounidenses.
"Confirmamos que Osiel Cárdenas Guillén fue liberado hoy", afirmó a la AFP una fuente del Buró Federal de Prisiones (BOP por sus siglas en inglés).
"Pasó bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE)", añadió.
Este viernes salió del Centro Penitenciario Terre Haute, en Indiana, donde purgaba la pena.
En México tiene varias acusaciones pendientes, pero se desconoce si el gobierno estadounidense lo deportará.
El Cártel del Golfo llegó a ser uno de los grupos criminales más temibles de México. Sin embargo, en los últimos años perdió influencia y se ha dividido en múltiples facciones.
Como jefe, Cárdenas Guillén, de 57 años, supervisó un imperio de narcotráfico responsable de la importación de miles de kilos de cocaína y marihuana a Estados Unidos desde México, según fuentes judiciales.
Apodado el 'Mata Amigos', fue detenido en 2003 en Tamaulipas (noreste de México) y extraditado en 2007 a Estados Unidos, donde fue condenado en 2010 a 25 años de cárcel y al pago de 50 millones de dólares.
La jueza desestimó algunos cargos por narcotráfico, aunque admitió haber dudado en aceptar su acuerdo de culpabilidad.
"Pido perdón a mi país, México, a Estados Unidos, a mi esposa y, en especial, a mis hijos por todos los errores que he cometido", declaró Cárdenas Guillén en el juicio.
El capo utilizó la violencia y la intimidación como medio para promover sus objetivos.
Reclutó a antiguos militares de las fuerzas especiales mexicanas para que formaran su guardia personal, pero esta fuerza de protección acabó operando por su cuenta con el nombre de Los Zetas, una de las bandas más sanguinarias de México hasta su desmantelamiento.