Trascendió Monterrey
Que tras la caída, perdón, renuncia de Carlos Romero Deschamps del sindicato petrolero, los líderes seccionales ya pusieron sus barbas a remojar.
Todos son hechura del renunciado y en Cadereyta, donde está el grueso de la sección 49, los trabajadores de la refinería tenían ayer opiniones encontradas sobre su dirigente seccional, Rafael Faly Ortuño González.
Algunos lo idolatran, pero otros no olvidan que no metió las manos para defender el año pasado a 200 trabajadores despedidos por un supuesto fraude con becas… que otorgaba el sindicato.
Que quien está empeñada en ir a contracorriente de la línea del gobierno federal es la diputada morenista Celia Alonso, dada su extraña obsesión por el municipio de Escobedo. Ayer protagonizó uno más de sus “numeritos” en la sesión ordinaria del Congreso, al atacar la labor municipal en materia de seguridad.
La legisladora olvida que la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, así como el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, han reconocido el trabajo de la alcaldesa Clara Luz Flores, al grado de nombrarla presidenta de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal.
Que no conforme, la diputada Alonso también se enfrenta con los reporteros de la fuente y pasa por alto las indicaciones de su coordinador, Ramiro González.
Ni sus compañeros de bancada entienden por qué quiere llevar la contra a las políticas impulsadas por el gobierno federal surgido de su propio partido.
Y por si faltaran garbanzos de a libra, la nueva adquisición de la fracción morenista, el diputado Marco González, en lugar de unir, le ha dado por la grilla interna.
Que como si faltaran retrasos, el gobierno del estado lanzó una nueva licitación para los vagones nuevos de la Línea 3 del Metro.
De acuerdo a la convocatoria publicada ayer en Periódico Oficial del Estado, el fallo definitivo se dará a conocer el 3 de diciembre. Si bien nos va, esa línea de Metro operaría hasta 2021.