Lucha de clases
La lucha política en Hidalgo es por la preservación de la clase dominadora que siempre ha sido la misma, pues, pero que ahora se muestra con muchas escisiones.
Durante toda la semana y desde días antes de que comenzara el estira y afloja por el Presupuesto 2020 en el Congreso local (porqué debate, discusión, análisis, nunca hubo), se preguntaba la ciudadanía, medios, opinión pública y muchos de los que ven los toros desde la barrera, ¿por qué está trabado todo?
La respuesta es la misma del principio, no es porque se busque recortar o poner más dinero a programas o se quieran dar partidas especiales o secretas para apoyar a la gente, o sacar adelante a las nuevas generaciones, o hacer cosas para el beneficio común, simplemente se quiere tener el control por encima de todo.
Un grupo, el de la Universidad Autónoma del Estado, la UAEH, el Grupo Universidad, quiere dinero para poder operar en las elecciones municipales de 2020, ganarle al PRI, ¿por qué?, no porque deseen el desarrollo político de Morena en Hidalgo sino porque ambicionan el salir airosos de todo el vendaval político y mediático del que ha sido protagonista la institución, sus autoridades y la cabeza del grupo, Gerardo Sosa Castelán.
Del otro lado, el PRI, el gobierno, los aliados, los demás partidos, ansían dar ese manotazo en la mesa en contra del Grupo Universidad dejando en claro que hay un estado de Derecho, cuando la propia ingobernabilidad no proviene de la gente, ni de los pueblos, ni de los usos y costumbres (aunque hay sus excepciones), sino de la propia política y sus actores.
Ellos son los que parten y reparten, la gente no está interesada más en pugnas ni divisiones, e incluso se han ido alejando poco a poco de todo el acontecer del Poder Legislativo; el agotamiento social y el hartazgo pueden cobrar una factura sorpresiva a los políticos si estos no se ponen del lado de la ciudadanía.
twitter: @laloflu