El lunes 3 de febrero, a medianoche, la ventana invernal del mercado de transferencias baja la persiana. El FC Barcelona ha tenido una actividad relativa en estas semanas previas, con una posibilidad moderada de incorporar algún refuerzo si se daban todas las condiciones deportivas y económicas. A la hora de la verdad, cuando restan 72 horas para que el actual mercado sea historia, no se han dado esas condiciones que pasaban por aligerar la masa salarial de la actual plantilla con la salida de alguno de los futbolistas. Se habló en primer lugar de
Ronald Araujo y acabó ampliando contrato y luego también sonaron los nombres de
Eric Garcia y de
Ansu Fati, pero ambos permanecen a las órdenes de
Hansi Flick. En cuanto a las hipotéticas entradas, habida cuenta que se había fijado como demarcación prioritaria a apuntalar la de extremo izquierdo, el candidato que más ha estado en el escaparate ha sido
Marcus Rashford, del Manchester United, quien incluso estaba dispuesto a moderarse el sueldo con tal de llegar cedido al Barça para la segunda parte de la temporada, pero finalmente parece decidido a irse al Aston Villa. Durante la rueda de prensa previa al Barça-Alavés,
Flick adoptó una actitud proteccionista cuando fue preguntado por si aún aguardaba algún fichaje de última hora. "No quiero hablar de eso, estoy contento con lo que tengo", afirmó.
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