A menudo se acusa al
Nottingham Forest y a sus seguidores de vivir anclados en el pasado, de recurrir demasiado a los relatos de sus gloriosos días bajo el mando de
Brian Clough y sus dos lejanos títulos de Copa de Europa. Sus acérrimos rivales del Notts County, en Trentside, que malviven ahora en la League Two, les achacan con malicia que solo viven recordando el fulgor de aquellos viejos tiempos. Tal vez sea inexacto y excesivo pensar así, si se atiende hoy al recorrido de los ‘tricky trees’ por los torneos ingleses, convertidos en el equipo animador y revelación. Están luchando por la Champions League, en el tercer puesto de la Premier, y el lunes pasado lograron acceder también a los cuartos de final de la FA Cup, tras tumbar al Ipswich Town en otra emocionante tanda de penaltis (5-4). Era la segunda que ganaban, con el portero belga
Matt Sels convertido en héroe por su última parada.
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