El gol que marcó ayer
Pedro Díaz en el Santiago Bernabéu ya nunca lo olvidará el mediocentro del Rayo Vallecano. Un gran disparo desde la frontal, imposible para
Lunin, y que además tuvo una enorme incertidumbre. Porque tuvo que esperar unos minutos hasta que el gol, una vez revisado por el VAR que confirmó que el balón había superado la línea de gol, cuando ya pudo celebrarlo.
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