'A punto ha estado hoy de no celebrarse el Gigante de Schladming. El estadio de Planai llevaba unos días registrando temperaturas demasiado suaves, e incluso lluvia hasta poco antes del comienzo de la carrera. Hoy se esperaba que las temperaturas bajasen, pero la organización temía entonces por la nieve que podía dejar en condiciones no idóneas la pista.
Finalmente se ha logrado salvar la prueba, bajando eso si la zona de salida y recortando por tanto de 47 a 35 puertas y en 15 segundos la carrera.
En estas condiciones Loïc Meillard daba esperanzas a los aficionados suizos después de que la estrella nacional Marco Odermatt no supiera arreglárselas bien en el estadio de Planai, donde hoy por poco se queda fuera del podio.
Pero una serie de pequeños errores ya de comienzo en esta segunda m...'