España se blinda frente a ataques yihadistas con drones
El Departamento de Seguridad Nacional (DSN) alerta de la amenaza que representa esta tecnología dentro de nuestras fronteras y destaca los protocolos para neutralizarlos
El uso de drones para perpetrar atentados es una realidad que ya se ha consumado en diferentes puntos del mundo... y también una amenaza para la seguridad nacional española. Los servicios de Información alertan de que estos ataques pueden inspirar a organizaciones terroristas para perpetrar sus ataques dentro de nuestras fronteras. Por eso trabajan en el desarrollo de una herramienta que permita la identificación de los pilotos o las aeronaves ante cualquier circunstancia que amenace la seguridad pública.
El Departamento de Seguridad Nacional (DSN), órgano de asesoramiento adscrito a la Moncloa, recoge esta amenaza en su Informe Anual 2019, un documento de 280 páginas en el que analiza los principales riesgos para España y las prospectivas de futuro. En sendos capítulos centrados en la lucha antiterrorista y en la protección del espacio aéreo recoge citas expresas sobre el uso de drones y su posible recurso por los grupos yihadistas.
Hay antecedentes que ponen de relieve la amenaza que representan los drones. Diversos aeropuertos británicos sufrieron graves problemas de colapso al detectar la irrupción no autorizada en su espacio aéreo de aeronaves controladas en remoto. La Policía Nacional también investigó una posible aparición de una de ellas en Madrid-Barajas. Y el que quizá fue el caso más llamativo tuvo lugar en septiembre en Arabia Saudí: la petrolera Aramco sufrió sendos ataques con drones que provocaron considerables daños materiales.
Cómo neutralizarlos
El avance en las tecnologías y el abaratamiento de los costes de producción hace que los drones estén al alcance de cualquier bolsillo. "Dada la tendencia referida del uso extendido de RPAS [Remotely Piloted Aircraft System, comúnmente conocido como dron] y debido a las amenazas emergentes que representan por su uso con fines terroristas o criminales o, incluso, debido a usos imprudentes, es un desafío al desarrollo de nuevas capacidades en el uso, control y gestión de todos los aspectos que puedan tener influencia en la Seguridad Nacional", detalla el informe.
Por eso, el DSN destaca la necesidad de prevenir un uso no autorizado de drones y, "llegado el caso, ser capaces de neutralizarlos". Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ya cuentan con algunos medios para 'tumbar' drones en pleno vuelo. En las elecciones generales del 10 de noviembre de 2019, la Policía Nacional desplegó a varios agentes con un rifle 'anti-drones' en el Centro Nacional de Difusión de Datos, al ser una infraestructura crítica.
GRACIAS a los más de 92.000 agentes que velan por la seguridad en las #EleccionesGenerales10N.
— La Moncloa (@desdelamoncloa) November 10, 2019
✔45.000 @guardiacivil
✔29.000 @policia
✔13.000 policías locales
✔5.000 policías autonómicas
Más de 500 agentes garantizan la seguridad del Centro Nacional de Difusión de Datos ⤵ pic.twitter.com/rDDbaf3d9S
Pero el DSN va un paso más allá y destaca la necesidad de "disponer de una herramienta" que posibilite la identificación de los pilotos y las aeronaves. Y destaca medios como el radar, la radiofrecuencia, la tecnología electro-óptica, los infrarrojos y la detección acústica.
Los drones y la propaganda
El Departamento de Seguridad Nacional también se hace eco de la propaganda a la que recurren las organizaciones terroristas para lograr sus fines: captar nuevos seguidores, radicalizar a sus fieles y darles las instrucciones necesarias para perpetrar sus ataques. Como contó Vozpópuli, Telegram ha registrado un crecimiento exponencial durante la pandemia del coronavirus de canales radicales. Sólo en el mes de abril, el sistema de mensajería clausuró más de 56.000 canales en todo el mundo por sus contenidos.
Una tendencia que no ha pasado desapercibida para el DSN: "En los próximos años, el terrorismo yihadista mantendrá su actividad en redes sociales y el ciberespacio, y seguirá suministrando información para la fabricación artesanal de explosivos y el empleo de nuevas tecnologías". Y añade: "Es previsible que los vehículos no tripulados ocupen un papel destacado".