Sánchez inicia su giro al centro con una defensa de la monarquía que sorprende hasta en el PSOE
El presidente del Gobierno se viste el traje monárquico y marca distancias con sus socios para neutralizar el impacto negativo que el acuerdo presupuestario con Bildu y ERC ha tenido en el PSOE
La defensa que Pedro Sánchez ha hecho del rey Felipe VI y de la presunción de inocencia de su padre ha causado cierto asombro en el seno del PSOE. No ha sorprendido tanto su alineamiento con el orden constitucional vigente frente a los embates de su socio de Gobierno y aliados parlamentarios separatistas, sino la vehemencia de sus palabras. El alegato de Sánchez a favor de la monarquía parlamentaria no es tanto un convencimiento personal, sino parte de de su estrategia de giro al centro para neutralizar el golpe que han supuesto los pactos con EH Bildu y ERC.
"Sánchez, el monárquico", comentaba a Vozpópuli con ironía el miembro de una ejecutiva regional del PSOE. La posición que ha fijado el presidente del Gobierno en defensa de la Corona no solo le aleja completamente de Podemos, sino que trata de cerrar una confrontación monarquía-república en el seno de su partido. Un debate que existe en el PSOE pero que de momento no se ha abordado en profundidad.
Las dos almas conviven en el partido. La más republicana en muchas de sus agrupaciones y entre sus cuadros más jóvenes y la defensora de la institucionalidad que este viernes ha encarnado como nadie Emiliano García Page. El presidente de Castilla-La Mancha ha dicho que lo único que necesita el Emérito para volver a España por Navidad es "una PCR".
Sánchez no ha llegado tan lejos, pero no ha escatimado en elogios hacia Felipe VI en su comparecencia de prensa en Bruselas tras el Consejo Europeo. El presidente del Gobierno ha dicho que el Rey "ha trasladado una imagen de transparencia" y que lo ha demostrado "con hechos" y no solo con palabras. Sánchez ha dicho que al actual monarca ha adaptado la Jefatura del Estado a las "exigencias de una sociedad democrática y avanzada en pleno siglo XXI".
Tibio con el rey emérito
Pero es que Sánchez tampoco ha sido especialmente duro con el caso del rey emérito. Ha subrayado su "presunción de inocencia". Y ha dicho que en caso de regresar a España será la Casa Real quién responda. Eso sí, ha precisado que Juan Carlos tiene las mismas obligaciones fiscales que cualquier ciudadano español.
Las palabras de Sánchez han dejado atónito a más de uno en el PSOE, pero no a quienes mejor le conocen. Como ya informó este diario, el jefe del Ejecutivo busca un perfil más moderado tras la negociación de Presupuestos. Sánchez se ha desmarcado por completo de Pablo Iglesias y sus portavoces, que insisten en el "horizonte republicano" y la comisión de investigación al Emérito en el Congreso. La vicepresidenta Carmen Calvo suele repetir que el posicionamiento de su socio morado es el del "cuarto partido" del arco parlamentario, en un claro intento por minusvalorar su importancia.
Los que conocen a Sánchez y a su director de Gabinete, Iván Redondo, aseguran que lo ocurrido esta semana ha sido una coreografía perfectamente preparada y ejecutada por La Moncloa. El diario El País informó en pleno puente de la Constitución de la intención del rey emérito de regularizar su situación con Hacienda.
La coreografía de Redondo
El martes, día de la Inmaculada, el presidente anunció su presencia en el informativo de Tele 5. Una entrevista en apariencia irrelevante con los Presupuestos aprobados y la legislatura estabilizada. Dos horas antes de su aparición en televisión, el abogado de Juan Carlos, Javier Sánchez-Junco, emitió un comunicado en el que reveló que el exmonarca había presentado ante las Autoridades Tributarias competentes el pago de 678.393,72 euros incluyendo intereses y recargos.
En esa misma entrevista, Sánchez aprovechó para renegar del término "gobierno socialcomunista", que usó Iglesias en el Congreso hace unos días. Y dijo que en casi mil días de presidente, "España no se ha roto, no hay una dictadura, no han venido los bolcheviques". Sánchez suma exactamente 925 días en La Moncloa. Es el periodo transcurrido desde su victoria en la moción de censura el 1 de junio del 2018 y el 12 de diciembre de este año.
"No es por supuesto una casualidad", explican estas fuentes. "La entrevista le vino como anillo al dedo para fijar posición y defender a Felipe VI, al que sin embargo no siempre ha tratado de la mejor manera".
A Sánchez, insisten, este traje monárquico "le es útil" para desviar el foco de sus acuerdos con la izquierda abertzale y el separatismo catalán. En el caso de la Corona, el PSOE no ha apoyado hasta ahora las iniciativas de sus socios de coalición y de Presupuestos para investigar al Emérito. No parece que vayan a hacerlo ahora, ni tampoco van a secundar vídeos como el que ha publicado el partido morado acompañando imágenes de la Jefatura del Estado con la música de la serie Narcos.
"Es curioso que Felipe VI sea ahora el mejor aliado de Sánchez para tapar los Presupuestos y empezar a centrar el partido", aseguran desde el PSOE. "Digan lo que digan, lo de Bildu ha tenido impacto interno y externo y el presidente y Redondo lo saben".