Así es la mansión de dos millones de euros que han comprado Rosalía y Rauw Alejandro
Rosalía no para de trabajar y de triunfar. Después de presentar el primer single 'La Fama', una bachata en la que colabora junto a The Weeknd, y sacar a la luz 'Hentai' y 'Saoko', algunas de las canciones que incluirá en su nuevo álbum Motomami, su tercer disco que será publicado el 18 de marzo.
Además en el terreno personal, la vida también le sonríe junto a su novio, el también cantante de Puerto Rico, Rauw Alejandro (Raúl Alejandro) que acaba de hacer oficial el lanzamiento de su nuevo sencillo, ‘Caprichoso’, uno de los temas que conformarán su próximo proyecto musical, ‘Trap Cake Vol.2’, que verá la luz en los próximos días.
Los dos se encuentran muy felices y enamorados, confirmaron su relación el pasado 25 de septiembre, y cosechando grandes éxitos, algo que se ve reflejado en el dinero que ganan. Por ello, no es de extrañar que se hayan fijado en un casoplón de dos millones de euros con 30 hectáreas.
Rosalía y su novio Rauw Alejandro se compran una mansión
Rosalía y su padre, el también artista Rauw Alejandro pusieron el ojo en la mansión La Morera o Mas Morera, situada en Manresa (Barcelona). La vivienda fue diseñada en 1905 por el arquitecto Ignasi Oms i Ponsa, figura del movimiento modernista catalán que llegó a realizar unos 60 edificios de estas características en la zona entre finales del siglo XIX y principios del XX.
Está catalogada como Bien Cultural de Interés Local (BCIL) y tiene una protección integral. Forma parte de la ruta Naturaleza y modernidad del Anillo Verde de la ciudad catalana. Hasta hace poco , en las páginas de las inmobiliarias la describían como "joya del Novecentismo".
Además se encuentra protegida dentro del Plan de Protección Especial del patrimonio de la ciudad de Manresa. El principal valor de este prodigio de la arquitectura es la historia que alberga su construcción.
A la pareja se la pudo ver merodeando el lugar, interesada en esta espectacular casa y finalmente, según publica 'Vanitatis', se decidieron a dar el paso de comprarla el pasado 11 de enero y ya se han iniciado los trámites de la reforma de la casa.
La finca, que tiene 30 hectáreas, tiene unas bonitas vistas a la naturaleza y a la montaña de Montserrat, y está muy bien conservada. Su precio, según Idealista, era de 1,87 millones de euros el pasado 4 de noviembre; mientras que Habitaclia, la valoró en 2,2 millones de euros.
El conjunto cuenta con una superficie construida total de 3.815 metros cuadrados, en los que se incluye la casa modernista de tres cuerpos en forma de U. Además de esta, tiene otras cuatro viviendas completas más, así como una zona de cuadras.
La propiedad posee también una amplia zona de jardín y piscina con una casita de 130m2 con cocina, vestidor y almacén, y una amplia zona de barbacoa. Los vendedores la ofrecían como inversión hotelera o para eventos.
La casa (la vivienda principal) consta de ocho suites con todo tipo de comodidades, una amplia cocina totalmente reformada, varios baños, dos salones de 120m2 y 90m2 con elegantes chimeneas de época, además de terrazas de gran tamaño que rodean la casa y un jacuzzi interior.
En la planta de abajo se ha conservado la gran bodega y zona de tinas de la casa original.
En su interior destaca una elegante escalinata con barandilla de madera, que conduce a la entrada principal, y las vidrieras, ambas diseñadas con las curvas características del movimiento artístico.
Sus anteriores propietarios: los dueños de la zapatería Torra
Esta perteneció a la familia propietaria de la famosa zapatería Torra de Manresa. La hija de este matrimonio es Rosa Oriol (Rosa Tous), cofundadora de Tous, quien heredó de sus padres esta propiedad y que fue la encargada de hacerla prosperar.
Hasta ahora, el titular de la propiedad que figuraba al registro de la propiedad número 1 de Manresa era Jean Claude Gaston Magnien, marido de la difunta, que la heredó de su esposa fallecida. Aunque originariamente la masía perteneció a la comunidad de los padres dominicos del convento de Sant Domènec de Manresa, hasta que fue vendido a particulares con la desamortización.
Según ha ido pasando de propietarios, la mansión se ha ido modificando aunque hay partes que no se pueden reformar ni alterar por su parte histórica como son las chimeneas de época, sus bóvedas de piedra y la bodega de la masía original. Rosalía y Rauw Alejandro podrán ponerla a su gusto y reformarla pero atendiendo a las normas.
