Casado oculta a su entorno si dimitirá ante los barones o continuará hasta el congreso
Pablo Casado afronta la recta final de su liderazgo al frente del PP sin desvelar cuáles son sus intenciones. El todavía presidente nacional trasmitirá a los barones en Génova su apuesta para una transición que llevará al partido hacia un congreso extraordinario en abril, pero ha preferido no enseñar esas cartas antes del cónclave en la sede nacional.
Así lo reconocen a Vozpópuli algunos de los más estrechos colaboradores de Casado, y que han estado junto a él estos últimos días en Génova: «La decisión es suya y no sabemos qué va a plantear a Feijóo y al resto de líderes autonómicos«, aseguran.
El pasado lunes, día en el que decidió convocar una junta directiva nacional para poner en marcha un congreso extraordinario, tenía decidido mantenerse en la presidencia del PP e, incluso, se planteaba muy seriamente presentarse a la reelección.
Ese escenario, de hecho, no fue descartado ayer por Teodoro García Egea. En la entrevista concedida a La Sexta, el exsecretario general del PP dejó la puerta abierta a esa posibilidad y advirtió que existe «un 70% de opciones» de que se presente más de un candidato para disputarle la presidencia del partido a Feijóo.
Gestora y portavocía
Los planes del dirigente gallego, sin embargo, son muy distintos a esa hipotética hoja de ruta que podría plantear esta tarde Pablo Casado a los líderes regionales.
Según confirman a Vozpópuli desde el entorno de Alberto Núñez Feijóo, el presidente de la Xunta dejará claro esta tarde en Génova que la mejor solución para la actual situación del PP es la dimisión inmediata de Pablo Casado y la formación, a través de la junta directiva nacional, de una ‘gestora’ o dirección provisional que pilote el partido hasta el congreso.
En paralelo, el PP deberá conformar un comité organizador del congreso y tampoco descarta la creación de una portavocía provisional, dentro del partido, para que la persona elegida sea el «rostro reconocible» del PP, ya la «referencia» para la prensa y el resto de formaciones políticas, hasta la elección de la próxima ejecutiva en abril.
El objetivo de Feijóo, tal y como se ha informado en este diario, es cerrar cuanto antes la etapa de Pablo Casado como presidente del PP para que afiliados, votantes, periodistas y rivales políticos tengan claro que se ha iniciado, «desde ya», un nuevo ciclo en el PP. Entre otras cosas, destacan las fuentes consultadas, «porque no hay tiempo que perder» y «apenas quedan 500 días para las generales«.
Dudas y división en el Grupo Parlamentario
La incertidumbre por el futuro del partido, y lo que pueda pactarse en la cumbre de Génova de esta tarde, empezaba a hacer mella esta mañana a la bancada del PP en el Congreso de los Diputados.
Diferentes parlamentarios consultados por Vozpópuli admitían que existen «muchas dudas» sobre el proceso orgánico que se abre ahora en el PP: «Nadie sabe si va a seguir Casado o se va a nombrar una gestora… ni qué va a pasar con la actual dirección del Grupo Parlamentario«.
Hay diputados que nos hemos dejado de hablar entre nosotros
En la bancada del PP, además, «la tensión es evidente» después de tres días de enfrentamientos soterrados en el propio chat del Grupo Parlamentario y entre los afines y detractores de Pablo Casado: «Hay diputados que nos hemos dejado de hablar entre nosotros».