De todo lo malo puede sacarse algo bueno. De una contienda entre paisanos, como fue la Guerra Civil española, quedan restos que ahora, pasados casi noventa años, se pueden visitar sin volver la vista atrás, sin rastro de ira . Porque no son lugares donde se enterró a gente en fosas comunes, sino refugios, parapetos, atalayas. Si nos gustan las fortificaciones árabes, a ver por qué no otras más modernas. Al fin y al cabo, todas cumplieron la misma función . Al fin y al cabo, también, detrás de las atrocidades puede esconderse la belleza. Читать дальше...