Vox agrava sus acusaciones en los juzgados contra Cabrera por el caso 'Principico'
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La juez de Instrucción número 13 de Sevilla lleva meses investigando el incidente del pasado 6 de enero, cuando Juan Carlos Cabrera protagonizó un incidente con los responsables del local ante la negativa de éstos a darle una mesa para diez comensales por las medidas del coronavirus, aunque ese día estaba permitido. Este incidente motivó la presencia de varias dotaciones policiales en el restaurante, llegando incluso a levantar varias actas administrativos contra el local.
Ahora Vox vuelve a la carga judicialmente. Ante la acumulación de pruebas que «corroboran la denuncia presentada de inicio por Vox y ante el peso de las mismas», ha presentado este mismo viernes una querella contra Juan Carlos Cabrera, delegado de Gobernación y máximo responsable de la Policía Local de Sevilla.
De esta forma, la acusación de Vox da un paso más elevando la gravedad de los hechos ocurridos el pasado 6 de enero en el restaurante sevillano. ¿Qué diferencia hay entre una denuncia y una querella? Según la representación legal de la formación de Santiago Abascal, una denuncia es una mera declaración de conocimiento de ciertos hechos que pueden ser constitutivos de delito. Una querella es la declaración formal de conocimiento y voluntad de constituirse como parte en el proceso penal.
«Tú no sabes quién soy yo»
Para Vox, «las numerosas pruebas hasta ahora practicadas han confirmado que no existía altercado alguno que aconsejara una actuación de la Policía Local». De hecho, añade que «la Policía Nacional confirmó que no existía causa para actuar, pero a pesar de ello, la Policía Local desplegó un número de agentes del todo desproporcionado durante más de cuatro horas».
Asimismo, según esta parte se habría confirmado que «el despliegue se produjo a raíz de una llamada de Cabrera al jefe de la Policía Local», algo que, a juicio de Vox, «el propio jefe de la Policía confirmó, a pesar de que en un principio fue negado por escrito por el delegado municipal ante el juzgado».
De las pruebas, el abogado del partido político extrae que «el operativo de la Policía Local se activa antes de que se recepcionara la llamada al 112 que, supuestamente, originó el operativo. Son hechos que han quedado acreditados con los propios informes aportados al juzgado por la Policía Local».
Además, a la querella interpuesta por Vox se adjunta un vídeo en el que, según describe la formación política en una nota, «se confirma todos los hechos denunciados». En dicho documento audiovisual un camarero del restaurante que atendió a Cabrera «confirma todos y cada uno de los hechos objeto de denuncia en su día», según Vox, los presuntos insultos racistas al empleado y la frase que el dirigente socialista le dijo: «Tú no sabes quién soy yo».
El día después de los hechos
En este sentido, un día después de los hechos, el concejal delegado de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, mantuvo un encuentro con Roberto Murados, el responsable del restaurante para zanjar la polémica generada en torno a la comida familiar. Este encuentro, promovido por el abogado del local, Joaquín Moeckel, finalizó de forma amistosa. El encargado del local negó que el día 6 de enero Cabrera le insultara o le hiciera cualquier comentario de contenido racista.
El encargado reconoció, según el letrado, que todo se debió a un error o a un «exceso de celo» ya que la normativa, concretamente el BOJA en vigor durante las pasadas Navidades, hacía excepciones y permitía que las reuniones en bares y cafeterías fueran de hasta diez personas durante algunos días festivos, como es el caso del 6 de enero.
En la querella, Vox vuelve a insistir en su petición de que la Justicia llame a declarar como investigado a Cabrera. Esto de momento no se ha producido. Este lunes, en cambio, está citado a testificar el dueño del bar. El grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Sevilla acusa al delegado de Seguridad y Movilidad por cinco delitos, entre ellos abuso de poder, prevaricación y coacciones.