Naciones y nacionalidades
La Constitución consagró en 1978 la indisoluble unidad de España. El texto es claro; el país no se puede dividir en trozos, como proponen algunos, sin romper el orden constitucional, pero tampoco se puede unificar por Decreto como el tiempos de Franco, como pregonan otros. ¿Por qué? Porque junto a esa unidad de la Nación también se reconoce en la Carta Magna el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones. Si se defiende la Constitución para unas cosas hay que defenderla para otras también, no sólo lo que nos gusta. Читать дальше...