A Phil Collins le sale una Angela Dobrowolski
Más vale un mal arreglo que un buen pleito. Es una norma que, en el caso ruptura matrimonial, ahorra verdaderos quebraderos de cabeza. Pero hay quien prefiere dar mucha guerra en los tribunales antes que rendirse a una pensión de «medio pelo». A Phil Collins, dos de sus tres divorcios (no hay datos del primero con la canadiense Andrea Bertorelli, madre de sus hijos Joely, que es adoptada, y Simon) le han costado, al amparo de sendos acuerdos judiciales, unos 47 millones de euros: a su segunda esposa... Читать дальше...