¿Raros disturbios?, de instigados a instigadores
A estas alturas pandémicas, según pronosticadores de ocasión, deberían estar recogiéndose los maltrechos despojos de los socialismos cubano y venezolano, arrastrados al abismo "coronavírico" por tremebundas crisis de salud y humanitaria. Pero, inesperadamente —como en las buenas series de ficción—, el guion de los acontecimientos dio un giro inesperado, tanto, que deja vergonzosamente descolocados el discurso altisonante —no pocas veces carnavalesco y estridente— de la contrarrevolución cubana.