Hay rivalidades que marcan épocas. Ahí están los 40 partidos entre Roger Federer y Novak Djokovic, los 50 entre Rafa Nadal y Djokovic y los 60 entre Djokovic y Nadal. No hay una derrota que alegre, todas han sido dolorosas, pero fueron duelos que dieron lustre al tenis; y suponía para los contendientes una oportunidad de buscar el detalle de mejora que lo impulsara para poder vencer. Pero hay otras rivalidades que no son tan gratificantes. Por lo menos, para uno de los dos contrincantes. Es la que protagonizan Djokovic y Gael Monfils ... Читать дальше...