Espadas advierte de que no hay marcha atrás con el Plan Respira

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha insistido este viernes en la clara apuesta del gobierno municipal por un modelo de movilidad sostenible, en el que «el vehículo privado pierda espacio a favor del peatón», y en este sentido, ha defendido el Plan Respira para la reducción de la circulación de turismos en el Centro, el desvío del tráfico hacia el exterior, y la conversión de la ronda histórica en una vía 30, que supone una limitación máxima de velocidad a 30 kilómetros por hora, entre otras medidas.


Así lo ha afirmado durante la visita a la calle Mateos Gago para comprobar el estado de las obras de semipeatonalización de esta céntrica vía. En este sentido, Espadas ha defendido, por su flexibilidad, el sistema de cámaras previsto en el Centro para descongestionar el tráfico en esta zona,aunque no avanza soluciones de aparcamiento ni de transporte público. «El sistema que vamos a licitar no tendrá incidencia en residentes y en trabajadores que tengan que desarrollar una actividad concreta en el Casco Antiguo, pero sí está contraindicado para quienes utilizan el Centro para cruzar la ciudad de norte a sur o buscan aparcamientos», ha añadido.


El alcalde ha destacado que el futuro Plan Respira «no es el Plan Centro de hace diez años", al tiempo que ha criticado a quienes "siguen defendiendo modelos arcaicos en materia de movilidad», en clara alusión al Partido Popular. Espadas ha señalado que «es hora de dar un paso valiente y abordar la cuestión del tráfico en el Casco Antiguo y otras zonas, como Triana o Kansas City, donde se alcanzan velocidades excesivas, por lo que es necesario calmar el tráfico, al igual que en la ronda urbana norte».


Sobre las obras en Mateos Gago, el regidor ha destacado el «buen ritmo» de los trabajos que se están desarrollando en esta vía y ha vaticinado que la intervención culminará, siempre que no haya incidentes, antes de lo anunciado, «mejorando así las previsiones», en torno a marzo y antes de la Semana Santa de 2021. La intervención, que tiene un presupuesto de 1,1 millones de euros y se desarrolla por fases, están causando menos molestias ya que registra un menor tránsito por las circunstancias actuales, derivadas del coronavirus.


Espadas ha señalado que será de las actuaciones «más importantes» de los próximos años, «no solo por el enclave privilegiado y la afluencia de turistas en la zona sino porque se van a renovar todas las redes de suministro», sin olvidar que se ganará «un nuevo espacio semipeatonal, siguiendo nuestro modelo de ciudad». El alcalde ha destacado, además, la colaboración de vecinos y residentes con el distrito Casco Antiguo y la coordinación que se ha llevado a cabo en todo momento.