EE.UU. y Rusia rebajan la tensión en Ucrania con un primer acercamiento
0
Por su parte, en las ocho horas de diálogo, los funcionarios rusos dijeron a sus homólogos estadounidenses que no tienen planes de invadir Ucrania. «No hay razón para temer algún tipo de escenario de escalada» dijo Sergei A. Ryabkov, viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, a los periodistas después de la reunión en Ginebra, según informa Reuters. «Las conversaciones fueron difíciles, largas, muy profesionales, profundas, concretas, sin intentos de pasar por alto algunos aspectos delicados», añadió Ryabkov. «Tuvimos la sensación de que la parte estadounidense tomó muy en serio las propuestas rusas y las estudió profundamente».
Desembarco de tropas rusas en Kazajistán la semana pasada
-
Reuters
No es que con estas conversaciones acabe la crisis. Sigue habiendo en la frontera con Ucrania decenas de miles de soldados rusos enviados allí por Vladimir Putin. Y la parte estadounidense dejó claro que no se fía del todo de las exigencias de Rusia. Según dijo Sherman, que es la número dos de la diplomacia estadounidense, «un país no puede cambiar las fronteras de otro por la fuerza, un país no puede dictar los términos de la política exterior de otro, o impedirle a otro país que elija sus propias alianzas».
En semanas pasadas, tras amasar sus tropas ante Ucrania, el Kremlin difundió una propuesta de acuerdo con los miembros de la OTAN y un tratado bilateral entre Rusia y EE.UU. En virtud de ambos, la Alianza Atlántica tendría que acceder a suspender todos los planes de membresía, no solamente con Ucrania, sino de antiguas repúblicas o satélites soviéticos. También debería poner fin a cualquier ejercicio militar cerca de las fronteras rusas. A cambio, el Kremlin dice que rebajaría la tensión, retiraría las tropas de Ucrania y respetaría otros compromisos.
Tanto la OTAN como EE.UU. se han negado, pues el tratado de conformación de la Alianza Atlántica de 1949 establece que la organización puede invitar a cualquier nación de Europa que esté dispuesta a contribuir con la seguridad en el área del Atlántico Norte, así como a cumplir con las obligaciones que implica ser miembro, como participar de la defensa mutua en caso de que un integrante sea atacado.