El regulador catalán investigará a TV3 por impedir utilizar el español
La polémica televisiva como consecuencia de la negativa de un presentador de TV3 a que una niña, participante en un concurso, respondiera una de las preguntas en español será estudiada por el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC). A propuesta del consejero saliente Daniel Sirera, el regulador audiovisual autonómico tendrá que posicionarse sobre si la televisión de la Generalitat cumplió con uno de sus principios como es el de velar por el pluralismo lingüístico.
El caso en cuestión se produjo el sábado 8 de enero durante el programa infantil ‘Atrapa’m si pots’ (’Atrápame si puedes’), un formato de concurso que también emiten las televisiones autonómicas del País Vasco y Aragón. Durante un momento del concurso, el conductor, Llucià Ferrer, le dijo a una de las participantes -que le había pedido responder a una de las preguntas en español- que eso era imposible: «No. Aquí eso sí que no. Es un concurso de TV3, en catalán, y tienes que responder en catalán». Y añadió una broma ridiculizando la respuesta, catalanizándola incorrectamente.
Desde PP, Cs y Vox se criticó la decisión del periodista. Inés Arrimadas (Cs) recordó que «en TV3 entrevistan a Otegi y ‘bromean’ con agredir a Guardias Civiles pero les parece intolerable responder en castellano en un programa infantil»; añadiendo: «Cientos de millones de dinero público para pagar esto». Ignacio Garriga (Vox) pidió el cierre de TV3 «lo antes posible». Y Lorena Roldán (PP) dijo que: «La televisión pública, la que pagamos todos. Ahí el dinero de los castellanohablantes les parece estupendo. Fanáticos de libro, pero la pela es la pela».
Pese a que el CAC analizará el programa, no parece ‘a priori’ que el ente regulador audiovisual tire de las orejas al periodista o sancione a TV3. Los tres miembros actuales del CAC están de salida, ya que el PSC tiene pactado un acuerdo con ERC y Junts para renovar los cinco consejeros (dos puestos están vacantes) en el pleno del Parlamento de Cataluña de finales de este mes de enero. Así, la mayoría del CAC volverá a manos nacionalistas, que han controlado el regulador desde su nacimiento excepto desde el pasado mes de junio, cuando los representantes de los partidos independentistas se redujeron a uno, por dos de los partidos constitucionalistas (uno del PSC y otro del PP).
Además, en los últimos años, el CAC se ha mostrado a favor de la praxis periodística de TV3 siempre que ha recibido quejas por su falta de pluralidad o imparcialidad, ya sea de particulares, asociaciones o partidos de la oposición. Solo en los últimos meses, el CAC constató que TV3 mantiene un sesgo independentista en la emisión de sus documentales, en un acuerdo que contó con los votos a favor de Sirera (PP) y Carme Figueras (PSC), y el voto en contra del presidente, Roger Loppacher (CiU/Junts).
Sin embargo, el regulador vio bien el señalamiento de la Guardia Civil (Mónica Terribas), la quema de la Constitución (Empar Moliner), las informaciones de las manifestaciones independentistas, mofarse de Manuel Cruz (sin su presencia) y defender que hay «presos políticos» en Cataluña.