?C?mo dar el primer paso?
Enero, as? como suele ser un mes de encuentro en los gimnasios y centros deportivos, tambi?n se ha caracterizado por ser una de las temporadas del a?o en que la gente acude a pedir informaci?n, orientaci?n y ayuda en materia de alcoholismo y otras adicciones, seguramente como parte de los estragos de las fiestas decembrinas para quienes padecen la enfermedad.
Este mes tenemos una mayor demanda, destac?ndose entre quienes acuden, la pregunta de ?c?mo apoyar a una persona que tiene problemas de consumo?
Normalmente son los familiares de un adicto, o de un adicto en potencia, quienes solicitan la informaci?n o quienes le piden al consumidor que busque ayuda.
Una de las preguntas m?s recurrentes es a d?nde acudir y qu? hacer, aunque quiz?s por ignorancia o falta de informaci?n, muchas personas siguen utilizando la frase ?a d?nde lo puedo anexar?
Lo primero que respondemos es que el verbo anexar lleva connotaciones estigmatizadas, a la vez que explicamos que los famosos anexos, en realidad centros no autorizados de atenci?n, no s?lo deber?an estar prohibidos, sino que son contraproducentes para la salud mental y emocional de quienes lamentablemente llegan a ser llevados ah? en contra de su voluntad.
Adicionalmente comentamos que, aunque se traten de centros oficiales con la NOM028, no todo adicto debe ser internado, ya que cada caso es diferente y primero debe hacerse una exploraci?n diagn?stica para poder sugerir la ruta terap?utica a seguir y evaluar si el prospecto es candidato a modelo residencial, ambulatorio o de ayuda mutua.
En caso de que sea la familia la que acude por informaci?n, lo conveniente es darles psicoeducaci?n, explicar con toda claridad qu? son las adicciones, cu?les son sus causas y qu? tipo de tratamientos hay, adem?s de darles t?cnicas para poder abordar al prospecto o de realizar una intervenci?n, ya cuando se tengan los pasos a seguir bien claros. En ning?n caso debe trat?rseles de moralizar o evangelizar, sino hablarles con realidad de lo que implica vivir con esta enfermedad y conmin?ndolos a que tampoco ellos intenten forzar al adicto a recibir ayuda o que entren en una guerra de poder que lo ?nico que hace es enfermar m?s al sistema familiar, sino a tener herramientas asertivas que les permitan lidiar de mejor forma con la situaci?n. En caso de que sea la familia la que acude por informaci?n, lo conveniente es darles psicoeducaci?n, explicar con toda claridad qu? son las adicciones, cu?les son sus causas y qu? tipo de tratamientos hay, adem?s de darles t?cnicas para poder abordar al prospecto o de realizar una intervenci?n.
En el caso de contar con la presencia del prospecto tampoco es bueno tratar de sermonear o utilizar est?mulos negativos para convencerles de aceptar un posible tratamiento.
Por ?ltimo, en este tema resulta importante destacar que la experiencia confirma que cuando se habla con claridad y sin estigmas de la enfermedad, de sus consecuencias y de las posibles soluciones que hay, adem?s de apelar a la sensibilidad del posible paciente, tratando de sugerirle que se d? la posibilidad de explorar si tiene una adicci?n o no, resulta de mayor utilidad para sembrar en la persona la oportunidad de que ella misma termine aceptando que necesita ayuda y est? dispuesta a dar el primer pasos.
Omar Cervantes