Arqueolog?a a trav?s de las nuevas generaciones en Tren Maya
Su rostro lo delata, el brillo en su mirada expresa que es capaz de superar las largas y extenuantes jornadas de trabajo que inician antes de que salga el sol. Yael S?nchez L?pez es un joven entusiasta y comprometido, quien desde el pasado 8 de febrero viaj? desde Chiapas, su estado natal, para asumir uno de los mayores retos de su vida: pertenecer al equipo de Salvamento Arqueol?gico que tiene a su cargo la prospecci?n, exploraci?n y documentaci?n de los mil 526 kil?metros por los que se construye el Tren Maya.
En pocos a?os ?l, como parte de las nuevas generaciones, al igual que los j?venes arque?logos contratados temporalmente por las empresas que construyen cada uno de los tramos del ferrocarril, aspira a seguir los pasos de los arque?logos y arque?logas que han enriquecido con sus exploraciones, an?lisis e investigaciones, los pasajes m?s significativos de la historia antigua de M?xico.
En la madrugada se levanta de un salto de la cama para alistarse, tomar lo necesario y salir lo m?s temprano posible, para robarle algunas horas al intenso calor del d?a, pues diariamente se trabaja a m?s de 40 grados bajo los candentes rayos del sol.
Se pone las botas con las que camina kil?metros para recorrer los asentamientos y monumentos arqueol?gicos identificados con el apoyo de la tecnolog?a, dice que apenas lleva explorados e intervenidos 30 de ellos, a partir de que se incorpor? al equipo de trabajo, bajo la direcci?n de la arque?loga Lourdes Toscano Hern?ndez.
Proceso de exploraci?n
El arribo al sitio arqueol?gico lo hace al lado de sus colegas, en una camioneta pickup, pues ese medio de transporte les permite entrar a los caminos de terracer?a con todo el equipo y los instrumentos de trabajo requeridos.
?Realizar? un registro sin excavaci?n, el cual consiste en verificar las dimensiones de este monumento, incluida la altura, para lo cual se le tomar?n fotograf?as. Con el apoyo de la prospecci?n encontramos muchos asentamientos y monumentos, sin embargo, es necesario hacer una confirmaci?n para determinar si necesitan ser excavados o solo se requiere cubrir con una geomalla y diferentes capas de tierra para que se preserven a la posteridad?.
Mientras el top?grafo y el dronero hacen su trabajo, Yael explora el terreno que era un sitio habitacional; con su pizarr?n y un plum?n negro escribe los datos necesarios para identificar ese sitio.
Explica que toda la informaci?n que recopilan es salvaguardada por el INAH, instituci?n que se encargan de administrarla y hacerla p?blica.
?Sin embargo es necesario considerar que esta es una primera etapa de la investigaci?n arqueol?gica, despu?s viene la otra parte, la de procesamiento de datos de investigaci?n para su posterior difusi?n: esperamos en un futuro no muy lejano se puedan publicar todos estos datos?, expresa satisfecho tras su contribuci?n a este proyecto arqueol?gico.
Del otro lado de ese basamento, un grupo de personas limpia el terreno donde se aprecia un enorme metate con un peso de m?s de 30 kilos, vestigios que certifican que en ese lugar existi? una unidad habitacional, explica Arturo Rivera, arque?logo responsable de la brigada de Salvamento Arqueol?gico. Luego precisa que este metate o piedra base, se utilizaba para moler ma?z o cacao, elemento que les servir? a los especialistas para poder calcular la antig?edad del sitio.
Nuevas generaciones
La arque?loga Lourdes Toscano Hern?ndez, investigadora del INAH Yucat?n y coordinadora del Tramo 3 del Tren Maya, reconoce la labor de los nuevos arque?logos y arque?logas, pero tambi?n de los especialistas de las distintas profesiones que les ayudan diariamente con la gesti?n de los datos y el procesamiento de la informaci?n recabada en campo.
Cuenta que durante los trabajos de exploraci?n se cay? y se rompi? la mano, y aunque ahora se vale de un bast?n de senderismo, no deja de imponer su ritmo, ese que los ha llevado a realizar miles de hallazgos. Y de entre todo lo que han descubierto, localizaron tres entierros con vasijas funerarias. Nuevamente destaca la colaboraci?n de los j?venes.
?Su participaci?n fue fundamental, debido a que una de las m?ximas de la arqueolog?a es que si se descubre una osamenta, se tiene que sacar ese mismo d?a, no se puede quedar para ma?ana y, si no alcanzamos a hacerlo, los arque?logos que son muy comprometidos, se quedaron a dormir en el lugar hasta que se realiz? el salvamento arqueol?gico?.
Aqu?, reconoce la experta, tanto los arque?logos, los top?grafos y droneros se solidarizaron, se quedaron en el lugar cuidando los vestigios prehisp?nicos, por lo que actualmente se encuentran bajo resguardo en el laboratorio.
An?cdota compartida como respuesta a los cuestionamientos sobre los saqueos que se han denunciado, derivados de la construcci?n del Tren Maya.
?Lamentablemente s? hubo saqueo, supongo que el saqueo se ha dado porque la gente est? desarraigada y se dio porque empezaron a ver que hab?a entierros. El il?cito se report?, se pidi? a la Guardia Nacional y eso ha ido frenando. Afortunadamente aqu? en Yucat?n eso no ha pasado?.
Complicaciones y t?rmino de un sue?o
A pesar del impulso para que el Tren Maya sea un detonador de la econom?a de la regi?n, en este proyecto, en el que los j?venes han contribuido en el proceso de rescate arqueol?gico, han padecido problemas para ejercer su labor, dada la lentitud para renovarles los contratos que recompensen su trabajo, aunque las labores de prospecci?n y excavaci?n contin?en. Por ello, algunos de estos entusiastas profesionales se han visto obligados a renunciar a este sue?o, y a su pasi?n por descubrir y velar por el patrimonio de M?xico.
El Tren Maya ha sido descrito como un proyecto que ayudar? a mejorar la calidad de la vida de las personas y, de esta manera, interconectar los estados de Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucat?n y Quintana Roo.