Estas son las baldosas más caras del mundo
Los azulejos Zellige son una de las formas de arte más valoradas y reconocibles de Marruecos. Pero este tipo de mosaico no es barato, especialmente en comparación con otros mosaicos populares hechos a máquina.
Un pie cuadrado de baldosas zellige puede costar u$s 50 y son excesivamente caras comparado con las baldosas de cerámica comunes, que podrían costar solo u$s 0,15 por pie cuadrado.
Pero, ¿qué es lo que vuelve a estas baldosas tan caras? ¿Y cómo conserva Marruecos este valioso arte?
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ZELLIGE: DE DÓNDE PROVIENEN Y CÓMO SE HACEN
Las baldosas Zellige, o baldosas marroquíes, son baldosas de terracota que se encuentran en Marruecos. Las baldosas Zellige son similares a las baldosas de las estaciones de tren subterráneas, sólo que a menudo son más cuadradas que rectangulares.
Durante siglos, estos mosaicos cortados a mano y hechos con una mezcla particular de arcilla han cubierto paredes, fuentes, piscinas, suelos y otros lugares del mundo islámico occidental.
Las baldosas zellige tienen cientos de años. Se fabricaron por primera vez en Fez, Marruecos, y el azulejo zellige más auténtico todavía proviene de esa región. Ha seguido siendo un centro para esta profesión debido a que las rocas de esa región son el mejor materiales para hacer arcilla de alta calidad
Sin embargo, hacer mosaicos zellige no es tan simple como encender una máquina en una fábrica. Los azulejos están hechos a mano por artesanos llamados maâlems. Se elaboran con arcilla natural y agua, luego se moldean a mano y se hornean, con hueso de aceituna. No hay dos azulejos zellige iguales en el mundo.
Después de cocidos, se aplica a mano un glaseado de esmalte. Ofrece protección y es un paso moderno en su fabricación.
ZELLIGE: POR QUÉ SON TAN CARAS
Inicialmente, estas baldosas estaban destinadas a la decoración de palacios y mezquitas, aunque desde entonces su uso se ha democratizado ampliamente.
Esta forma de arte depende de los hábiles artesanos que fabrican cada baldosa a mano, y aunque la perfección a menudo se valora, son las cualidades imperfectas de estas baldosas las que hacen que los azulejos sean tan únicos.
Es la característica principal que distingue al zellige del producido en masa. Además, la dificultad depende del tamaño de los mosaicos, ya que cuanto más pequeñas sean las baldosas, más difícil será el cincelado a mano, por lo que el diseño será más costoso.
La demanda ha crecido en los EE. UU., especialmente en los últimos años, ya que diseñadores notables como Kelly Warsler incorporan el zellige en su propio trabajo, aunque nunca logran emularlos por completo.
Otra de las razones por la que este tipo de baldosa es tan caras es que el trabajo artesanal demora mucho más tiempo, además de que los artesanos deben estar dispuestos a pasar décadas aprendiendo el oficio detrás de este diseño marroquí característico.