Cuando Ansu Fati saltó al terreno de juego ante el Levante, el Barça 2021-22 llevaba marcados 10 goles en casi siete partidos completos. Pocos tantos pero, eso sí, conseguidos de casi todas las formas posibles: en ataque estático o al contragolpe, de jugada, de remate de falta, de penalti, con la derecha, con la izquierda e incluso dos de cabeza... Pero faltaba algo básico en el fútbol: el gol desde fuera del área. El disparo lejano era una especialidad de Koeman en su época de jugador, en su primer... Читать дальше...