Eugenia y Cayetano Martínez de Irujo, dos hermanos cómplices y enamorados en la hípica
La diseñadora, acompañada por Narcís Rebollo, ha presumido de su buena relación con su 'cuñada' Bárbara Mirjan, con la que compartió confidencias mientras el jinete competía en el torneo hípico celebrado este fin de semana en la capital
MADRID, 6 (CHANCE)
Una vez más el Club de Campo Villa de Madrid se ha convertido en el epicentro del glamour este fin de semana gracias a la celebración del Concurso Hípico Internacional Longines EEF Serie. Una competición en la que concursaron rostros tan conocidos como la Infanta Elena, Sergio Álvarez Moya o Cayetano Martínez de Irujo, que en esta ocasión ha contado con unos apoyos tan especiales como importantes.
En primer lugar su pareja, Bárbara Mirján, uno de los grandes apoyos del jinete en esta etapa de tranquilidad en la que completamente recuperado de sus problemas de salud, ha retomado a tope la competición hípica. Siempre a su lado, la joven presumió de la especial relación que mantiene con la familia de Cayetano, con el que lleva casi seis años de discreta relación.
Y es que en esta ocasión el jinete ha contado con un importante apoyo familiar durante todo el fin de semana. El sábado fueron sus hijos, Luis y Amina Martínez de Irujo quienes acudieron al Club de Campo para animar a su padre. Feliz, el Duque de Arjona derrochó complicidad y risas con los jóvenes, que están a punto de cumplir 21 años y que en raras ocasiones se dejan ver en algún evento público.
El domingo Cayetano contó con una inesperada visita sorpresa que le hizo mucha ilusión, la de su hermana Eugenia Martínez de Irujo. Demostrando que entre ellos no existe ningún tipo de problema y que el distanciamiento es cosa del pasado, la diseñadora quiso arropar al jinete en la última jornada del torneo. Acompañada por su inseparable Narcís Rebollo - derrochan tanto amor que no pueden ser más adorables - la Duquesa de Montoro presumió de la buena relación que mantiene con Bárbara Mirjan, con la que compartió risas y charla durante buena parte de la jornada.
Con ese toque boho que ha hecho ya su seña de identidad, Eugenia lució una blusa blanca con flores bordadas en rojo, amarillo y azul, pantalón también en blanco y bolso de croché con flores, mientras Bárbara eligió un vestido midi en blanco y negro y un elegante collar en rojo.